A lo largo de todo el verano de 2022, la historia que rodeaba el futuro de Facundo Campazzo era la misma: cuando se realicen los dos grandes movimientos (las salidas de Irving y Durant de Brooklyn) el mercado se desbloqueará. Sin embargo, eso no acabó sucediendo y la opción de volver a Europa se ha vuelto cada vez más real.
En este nuevo escenario, que no era el preferido por el base argentino, el Real Madrid se presenta como la alternativa más viable. No solo le podrían ofrecer un contrato suculento, sino que también le permitiría olvidarse de la archiconocida cláusula de salida que se firmó en el verano de 2020.
Sin embargo, este prisma tiene más aristas. El proyecto del equipo blanco ya está cerrado. Más allá de las numerosas bajas en diferentes puestos que obligaron a Chus Mateo a incluir en la convocatoria del encuentro contra Obradoiro al junior Hugo González, los madridistas ya tienen 17 fichas, entre ellas, tres bases puros.
Nigel Williams-Goss llegó la temporada pasada con la vitola de ser uno del os bases más prometedores del Viejo Continente. Tras abandonar la NBA en el mes de enero de 2021 para recalar en el Lokomotiv ruso, su desparpajo, conocimiento del juego y capacidad defensiva cargaban de razones a todos aquellos que veían en él un base titular de un equipo candidato a la Final Four.
Pese a todo esto, su primera temporada en la Casa Blanca estuvo llena de altibajos. Combinó momentos realmente productivos, con deficiencias que provocaron sonadas ausencias en partidos trascendentales como la final de la Copa del Rey de Granada. Por tanto, en caso de que Campazzo firmara otra vez con el Madrid, NWG tendría bastantes números para hacer las maletas.
El caso de Carlos Alocén tiene componentes parecidos. El maño llegó al WiZink Center el verano anterior a la salida de Campazzo. Desde el principio tuvo un rol relevante tras las salida del cordobés, pero su nivel estuvo lejos de ser suficiente para jugar treinta minutos en un candidato a la Euroliga.
La temporada pasada, sin un base titular estrella, era la gran oportunidad de Alocén. La mala suerte quiso que el ligamento de su rodilla se rompiese. Actualmente sigue de baja, aunque se le espera para dentro de dos o tres meses. A partir de ahí, el periodo de recuperación física dejará paso a un proceso en el que retomará el ritmo competitivo. La verdadera pregunta que se debe hacer la dirección del Real Madrid es: ¿Debe coger confianza Alocén en el Real Madrid o en un equipo ACB con más minutos?
Otros condicionantes previos a la negociación con Campazzo son la vuelta de Sergio Rodríguez y la continuidad en plantilla de otros activos como Llull o Hanga. El balear y el magiar han jugado en la posición de uno a lo largo de su carrera. Además, la demarcación del exjugador del Barça ya tiene un exceso de efectivos, con lo cual la opción de ser ‘playmaker’ para defender en primera línea y generar ofensivamente a través de Musa, Causeur o Hezonja es más que real.
Las negociaciones pueden ser complejas y existe una variable que el entorno de Campazzo puede seguir manejando: mantener la puerta de la NBA abierta. En ese escenario, el Real Madrid deberá valorar si quiere comprometer temporalmente su plantilla para hacer acomodo a un jugador top, pero sin intención de jugar en la capital de España por mucho tiempo.