Esfuerzo colectivo para superar las dificultades
Unicaja llegaba al Bizkaia Arena muy tocado. Con tan solo 4 partidos ganados en la ACB (los mismos que Bizkaia Bilbao Basket), se le agotaban las oportunidades para lograr una plaza para la disputa de la Copa del Rey. Además, contaba con las sensibles bajas de Saúl Blanco y Robert Archibald, además de tener a Joel Freeland muy tocado (por este motivo, Aito ha optado por convocar para este encuentro al veteranisimo Larry Lewis y al joven Augusto Cesar Lima en detrimento de Taquan Dean, que se ha quedado sin jugar hoy). Difíciles circunstancias que no ha dejado de recordar Aito Garcia Reneses en la rueda de prensa posterior al partido (escuchando al técnico de Unicaja, por su tono y el contenido de su intervención, no parecía precisamente, que su equipo hubiera ganado).
En este contexto, los hombres de Aito han sacado el partido de hoy adelante a base de esfuerzo colectivo. Los jugadores de Unicaja se han puesto el mono de trabajo y han completado un partido realmente meritorio. Bien plantados en la cancha y bien dirigidos desde el banquillo, los de la Costa del Sol han ejecutado a la perfección el guión marcado por Aito Garcia Reneses.
Y eso que el comienzo del encuentro, lleno de imprecisiones por parte malagueña, no presagiaba nada positivo para Unicaja. Bizkaia Bilbao Basket daba primero y se marchaba en los primeros compases del partido con hasta 7 puntos de ventajaba (14-7). Sin embargo, los visitantes reaccionarían inmediatamente. La entrada de Guillem Rubio y Georgios Printezis endurecería la, hasta ese momento, débil defensa interior malagueña y el encuentro pronto se igualaría, alcanzando los de Aito el final del primer cuarto con 2 puntos de ventaja (20-22).
A partir de entonces, y con Unicaja asentado en la cancha, el encuentro estaría en manos de los malagueños. No había ventajas amplias a favor de Unicaja, pero daba la sensación de que Bizkaia Bilbao Basket pendía de un hilo (el acierto en el tiro exterior y las acciones individuales) mientras que el juego de los de Aito era más sólido, más compacto, con una defensa realmente brillante y jugando con paciencia y eficacia en ataque. Tras llegar 6 arriba al descanso (35-41) y con una renta de 4 a los 10 minutos finales (54-58), Unicaja daría la estocada final en el último cuarto, a través de una zona que se le atragantó a Bizkaia Bilbao Basket. Los jugadores bilbaínos se chocaron una y otra vez contra el muro defensivo tejido por los visitantes, mientras que Unicaja anotaba en ataque con fluidez, de la mano de Joel Freeland (8 puntos y 1 rebote), Shamond Williams (9 puntos y 3 asistencias) y Berni Rodríguez (10 puntos), que despertaron en el momento adecuado. Al final justa y clara victoria malagueña por 70-81.
Todos los jugadores utilizados por Aito pusieron su granito de arena en la victoria, pero por encima del resto sobresalieron nombres como Georgios Printezis (15 puntos, 2 rebotes, 2 asistencis), minutos realmente inspirados en el tercer cuarto, o Jiri Welsch (10 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias), gran aportación en muchos apartados del juego. Mención especial merece el partido completado por Carlos Jiménez (8 puntos, 10 rebotes y 1 tapón), soberbio en defensa, de gran ayuda en el rebote, que sumó 20 de valoración habiendo lanzado en tan sólo 4 ocasiones a canasta.
Bizkaia Bilbao Basket aguantó … hasta que duró el acierto de las individualidades
Tras unas últimas victorias en ACB y Eurocup que llamaban a la esperanza y el optimismo, la derrota de hoy ante Unicaja ha sido un jarro de agua fría para la afición de Bizkaia Bilbao Basket. El equipo de Vidorreta ha completado un partido gris, mal en lo colectivo y en el que se ha sobrevivido gracias a la calidad individual ofensiva existente en la plantilla.
Cuando no eran los triples de Blums o Salgado, eran las acciones en 1 X 1 de Alex Mumbrú (19 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias), una vez más, el mejor del equipo vasco, y Robert Conley (18 puntos) lo que permitía seguir vivo en el encuentro a Bizkaia Bilbao Basket. Pero no se jugaba con la fluidez de ideas necesaria. Y eso se acaba pagando. El "yo me lo guiso, yo me lo como" le costó a Bizkaia Bilbao Basket nada menos que 19 pérdidas de balón. Además, en el último periodo vendría la zona impuesta por Aito, que fundió y cortocircuitó literalmente el ataque local. La fluidez de circulación de balón necesaria no existió de cara a atacar esa defensa y se continuó abusando del bote y el 1 x 1.
En definitiva, los de Aito jugaron como un bloque sólido y los de casa tiraron de acierto en el lanzamiento exterior y de calidad individual. Y al final, se impuso el bloque.
Vuelven las dudas a Bilbao …
¿Qué hecho yo para merecer esto? (la mala suerte de Chris)
Algo parecido debe estar preguntándose Chris Warren. Tras lastimarse un tobillo en el primer encuentro de la temporada ACB tuvo que estar todo el mes de octubre en el dique seco. Volvió en noviembre, para volver a lesionarse a las primeras de cambio. En este caso, una fractura en su mano derecho. Otro mes más de convalecencia y vuelta a las canchas a primeros de diciembre. Todavia se encontraba en periodo de adaptación al ritmo de competición cuando ha vuelto a caer lesionado en el encuentro de hoy. No ha habido dos sin tres para el hombre Warren. Ha vuelto ha dañarse en mismo tobillo en el que sufrió un fuerte esguince al comienzo de la temporada y que le alejó de las canchas durante el primer mes de competición. Desconocemos el alcance de la lesión, pero Txus Vidorreta admitía que "podía ir para largo". Suponemos que su lugar en la plantilla será ocupador por el veterano Paco Vázquez, jugador que, tras la renovación de Robert Conley, había sido descartado por Vidorreta para la ACB.