Los dos equipos comenzaban con sorpresas en sus quintetos titulares, al salir Maxime De Zeeuw de inicio por Monbus Obradoiro, mientras que Valencia formaba con Colom y Vives juntos, más Doornekamp, Ndour y Labeyrie. Las ausencias de Loyd, Sastre y Tobey motivan quintetos poco habituales en el equipo de Jaume Ponsarnau. Los de Moncho Fernández comenzaron llevando la iniciativa gracias al acierto en el tiro que les había faltado en las últimas derrotas. Un fantástico 3 de 3 en triples, con Czerapowicz, De Zeeuw y Pozas como protagonistas, situaba el marcador en 9 a 5. A los taronja les costaba anotar ante la defensa gallega y se mantenían con algunas buenas acciones de Colom y Ndour. Czerapowicz aportaba en todas las facetas para el Obra, taponazo incluído a un contraataque de Colom, y Kravic entraba en juego con dos canastas seguidas. Vives cogía protagonismo anotando seis puntos consecutivos para acercar a los suyos a la mínima distancia (14-13). Obradoiro reaccionaba bien, primero con una canasta de De Zeeuw y luego enconmendandose a sus rookies NCAA, que fabricaban un 5 a 0, con canasta de Daum tras rebote ofensivo y el primer triple de Magee, desacertado hasta ese momento. El primer cuarto acababa con 21 a 15 para los gallegos.

El segundo cuarto comenzaba con la jugada del partido: Kravic robaba el balón por anticipación y dejaba un pase por la espalda inhabitual en un pívot para el triple de Daum. Kravic se convertía en el dominador del encuentro y dejaba otra jugada para el Top7 Kia con un gran mate dejando atrás a Dubljevic, sumando un total de seis puntos consecutivos. Los gallegos estaban dando un recital que los ponía diez arriba (30-20) pero los valencianos contestaban con acciones de Dubljevic y San Emeterio. Moncho Fernández volvía a probar la fórmula de los tres altos, al dar un descanso a Kravic y juntar a Brodziansky, Daum y De Zeeuw. Valencia firmaba un parcial de 10 a 0, gracias a Van Rossom, Marinkovic y, sobre todo, San Emeterio con 5 puntos. El partido entraba en una fase de intercambio de canastas, en la que Brodziansky y Motum mantenían un bonito duelo y Daum y San Emeterio se colaban para establecer el empate a 40. El público del Fontes do Sar no estaba contento con lo que entendía una diferencia de criterio arbitral en los contactos de uno y otro equipo y lo expresaba con sus silbidos. Pozas y Navarro firmaban un 4 a 0 para deshacer el empate. Colom ponía el 44 a 42 con el que el partido se iba al descanso. Obradoiro perdía la batalla por el rebote otra vez, pero la actuación de Kravic y un gran 7 de 14 en triples los mantenían arriba en el ecuador del duelo.

En el inicio de la segunda parte se mantenía el intercambio de canastas, con los ataques de ambos equipos imponiéndose claramente a las defensas. Van Rossom, Dubljevic y Labeyrie llevaban la iniciativa taronja, mientras Kravic y Czerapowicz anotaban para el Obra. Brodziansky firmaba un 6 a 0 con un triple y tres tiros libres para distanciar ligeramente a los gallegos (54-49). Dubljevic y Saneme mostraban su veteranía y calidad para ir recortando poco a poco las distancias hasta poner a Valencia nuevamente arriba gracias a un 9 a 2 a su favor frabricado integramente por ellos dos. Vives lo convertía en un 14 a 2 con cinco puntos seguidos para el 58 a 65. Un intercambio de triples entre Magee y Labeyrie dejaba el marcador en 61 a 68 antes del período final. 

 

 

Ndour abría el marcador del último cuarto y el partido comenzaba a tener color naranja, pero la lucha del Obra se personificaba en un robo y canasta de Pozas, sumado a varias buenas acciones defensivas de los gallegos. Daum y Czerapowicz continuaban la canasta del base para un 7 a 0 que volvía a poner el partido en puño. Volvía a ser un duelo de poder a poder, en el que Moncho apostaba por un quinteto muy alto con Czerapowicz, Daum, De Zeeuw y Kravic se juntaban para jugar siempre un uno contra uno en la zona contra rivales más bajos. San Emeterio y Dubljevic seguían liderando las ventajas de los suyos, mientras Daum y De Zeeuw anotaban desde dentro. El belga ponía el empate a 79, que deshacía San Emeterio desde el tiro libre. Tras tiempo muerto Czerapowicz recibía tras jugar un dentro-fuera y ponía por delante al Obra desde el triple. Labeyrie recibía falta en el rebote pero solo anotaba un libre, dejando otra vez el empate. El balón era otra vez para Daum al poste, que conseguía una gran canasta a pesar de la defensa de Doornekamp. A Valencia le quedaban ocho segundos y Van Rossom conseguía irse de su defensor pero recibía falta y solo anotaba uno de los tiros libres. Quedaban seis segundos, pero a Valencia le perjudicaba en ese caso no haber llegado aún al bonus, por lo que la primera falta no le servía para nada y hacía correr ligeramente el tiempo. En el segundo saque, Czerapowicz recibía liberado y a Labeyrie se le señalizaba falta antideportiva al llegar tarde, que sería revisada en el Instant Replay, confirmando la primera señalización . El sueco no fallaba desde la línea y Obradoiro realizaba un buen saque de fondo para cerrar una gran victoria.