4 meses después se volvieron a verse las caras en el escenario en el que Bizkaia Bilbao Basket tocó el cielo y Real Madrid cayó en el infierno. Hombres de Negro y blancos regresaban a Miribilla donde los locales lograron el pase a la final de la ACB, dejando en la cuneta al todopoderoso equipo madrileño. Esta vez el Efecto Miribilla volvió a aparecer en un encuentro espectacular, impropio de un comienzo de temporada. Sabor de playoff en un duelo que, como ya pasó en las series de semifinales de la temporada pasada, se decantó a favor de los bilbaínos por 86-82.

Jugadas para recordar, tensión, polémica y emoción. Todos los condimentos para hacer de este partido un encuentro para recordar. De los que enganchan a la afición. La Liga Endesa necesita de más partidos de este estilo como reclamo para recuperar en los medios el sitio que le debería pertenecer.

A pesar de lo que pudiera parece por el resultado final, Bizkaia Bilbao Basket tuvo contra las cuerdas al Real Madrid durante gran parte del encuentro. Los de Katsikaris tuvieron un inicio arrebatador, marcando un 14-0 de parcial en los primeros 4 minutos de encuentro. Katsikaris situaba a Mumbrú y a Grimau en el quinteto inicial, buscando ambos exteriors llevar al poste a sus pares, mietras que Fischer y Banic les dejaban espacios jugando más alejados del aro de lo normal. Además, cuando se podía correr, Jackson ponía la magia. Real Madrid lograba parar la sangría en defensa, pero con todo, los de casa se iban de 10 puntos al final del 1º periodo (24-14).

En el 2º periodo se volvió a vivir otro estirón de los de casa que volvían a poner el encuentro al borde de la ruptura. Raül López, saliendo desde el banquillo, dominaba el tempo del encuentro y acertaba desde el 6.75. A la fiesta se unían un Marko Banic dando un clínic gratuito de movimientos al poste a los hombres del Real Madrid y Kostas Vasileiadis, ese jugador completamente impredecible, capaz de revolucionar un partido el sólo. Seguía el chaparrón de juego de los de Katsikaris, que alcanzaban su máxima renta a 3 minutos y medio del descano (43-26, min. 17). Pablo Laso se vio obligado a pedir tiempo muerto, que sirvió para que los blancos despertaran en defensa. El esfuerzo madridista para parar la ofensiva resultó efectivo, pero un triple de un acertadísimo Raül López dejaría a su equipo al descanso con un cordón de seguridad más que considerable (46-33) ante un conjunto blanco que se tenía que agarrar al trabajo de Felipe Reyes (10 puntos al descanso).

A la vuelta de vestuarios, fue Aaron Jackson (5 minutos en pista durante la primera parte tras cargarse de faltas de forma prematura) el que cogió el testigo de Raül López, volviendo a imprimir electricidad al juego de Bizkaia Bilbao Basket. Aparecía también Alex Mumbrú, que con 6 puntos consecutivos (triple y 2+1) daría su equipo la mñaxima ventaja de todo el partido, nada menos que 19 puntos (62-43, min. 26). En otra situación extrema y con el partido casi roto, llegó otra reacción madridista para insuflarle de nuevo vida al encuentro. Merced a una zona que se le atragantó a los locales, los de Laso marcaron un parcial de 2-15, culminado con un triple sobre la bocina de Sergio Llull, que dejaba el marcador en 64-58 de cara a los últimos 10 minutos de juego.

El bajonazo de los de casa continúo en los primeros instantes del último periodo. El parcial era ya de 2-19 y el Bizkaia Bilbao Basket sentía el aliento del rival en su nuca (64-62). Resurgía la figura de Kostas Vasileiadis para mantener a flote a un equipo bilbaíno que sufría lo indecible para seguir por delante en el marcador. Y con heróica incluída; tras un triple del griego, se resentía de su lesión de tobillo. Dejaba la cancha para volver a ella pocos minutos después. En un último golpe de riñón, Aaron Jackson colocaba a Bizkaia Bilbao Baskethasta 7 arriba con 3 minutos por disputarse (78-71) ¿Sería suficiente colchón de cara a los instantes finales? Pues, por poco no. Varios fogonazos de Rudy Fernández y la magnífica labor de Felipe Reyes debajo de los aros situaría a los de Laso a un solo punto de los de casa a menos de medio minuto para el pitido final (80-79). Se daría paso a una rueda de tiros libres que desnivelaría la balanza definitivamente a favor de Bizkaia Bilbao Basket merced a un fallo desde la línea de Sergio Llull (5/11 en TL esta noche). Al final, el Real Madrid volvía a caer en Miribilla (86-82).

Magnífica puesta de largo de Bizkaia Bilbao Basket en su cancha en la presente edición de la Liga Endesa. Disputó 2/3-s de encuentro a un nivel excepcional, con una defensa plena de intensidad y con sus grandes individualidades tomándose el relevo los unos a los otros en ataque. En la recta final se bajaría el pistón, algo entendible debido a las bajas de jugadores como Hervelle o Mavroeidis que limitaban mucho la rotación interior. Magnífico planteamiernto el de Fotis Katsikaris, situando a exteriores como Mumbrú y Grimau jugando al poste, lo que permitió sumar un buen número de 2+1.

Gran labor coral en Bizkaia Bilbao Basket, con 6 hombres por encima de los dobles dígitos en anotación y en valoración. La pareja de bases del equipo es la mejor y más complementaria de la liga: eléctrico como es habitual Aaron Jackson (12 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias) y Raül López (11 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias) con mano firme en la dirección y muñeca de seda en el tiro exterior. Kostas Vasileiadis (18 puntos) y Alex Mumbrú (15 puntos y 4 rebotes) tuvieron momentos de gran lucidez ofensiva. Marko Banic (13 puntos y 6 rebotes), sobrio y seguro como siempre. Y D`or Fischer (10 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias y 2 tapones) dando presencia al juego interior vasco y pasando muy bien la bola. Roguer Grimau no firmó unos números excepcionales (5 puntos, 3 rebotes y 2 asistencias para -2 de valoración), pero tal y como afirmó Fotis Katsikaris al final del encuentro, "los números no lo dicen todo, Roger ha sido básico en la victoria". Secó a Carroll, puso una intensidad en la cancha contagiosa y capturó un rebote ofensivo vital para Bizkaia Bilbao Basket.

En cuanto al Real Madrid, se enganchó muy tarde al partido, salió a la cancha muy blando en defensa… pero, con todo, estuvo bien cerca de llevarse el partido. Felipe Reyes fue el mejor por los blancos con 18 puntos y 7 rebotes. Rudy Fernández se le vio metido en el partido, situándose en el centro del huracán en muchas de las jugadas calientes. Acabó con 17 puntos, 5 rebotes y 2 asistencias. También estuvo bien en el aspecto ofensivo Ante Tomic (17 puntos y 5 rebotes, 8/10 TC). En el lado negativo, desacertado Jaycee Carroll (3/11 TC) y completamente inadvertido Nikola Mirotic (0 puntos en 11 minutos)