Se enfrentaban en Miribilla dos equipos cuya exitosa participación en competición europea (Bilbao en Euroliga, Fuenlabrada en Eurochallenge) les está costando más de un disgusto en la Liga Endesa, además de estar pagando una dura factura a nivel físico. Gescrap Bizkaia y Mad-Croc Fuenlabrada no se encuentra precisamente en su mejor momento en la liga y ambos conjuntos querían modificar su tendencia negativa. Además de los resultados negativos (3 derrotas consecutivas en la competición doméstica), los de Katsikaris están padeciendo una plaga de pequeñas lesiones que les hacía presentarse prácticamente en cuadro ante los de Fisac. A las bajas conocidas de Roger Grimau y de D’or Fischer, se les unía la del otro pívot, Dimitrios Mavroeidis. Además, se conocía que Aaron Jackson iba a jugar infiltrado para intentar superar los dolores producidos por un duro golpe en la cadera.
Gescrap Bizkaia supo hacer de la necesidad virtud para sacar adelante un compromiso muy complicado. Sin un pívot nato disponible, Marko Banic y Axel Hervelle se convirtieron en las únicas referencias interiores del equipo, con minutos para Alex Mumbrú (12 puntos y 9 rebotes) como falso 4y con Mamadou Samb como único hombre alto legítimo para darles descanso. Y cuando menores eran los mimbres fue cuando, curiosamente, los de Katsikaris más jugaron con su debilitado juego interior. Marko Banic (26 puntos y 5 rebotes) y Axel Hervelle (17 puntos y 7 rebotes) se multiplicaron para optimizar los balones que les llegaron, siendo básicos en la consecución de la victoria local por 92-81. Todo ello ante un correoso Mad-Croc Fuenlabrada que jamás bajó los brazos. Se mantuvo en todo momento en el partido de la mano de un Leo Mainoldi completando un auténtico partidazo (25 puntos y 10 rebotes) y le puso las cosas muy difíciles a los locales. En contraste con la priorización del juego en la pintura de Gescrap Bizkaia, los de Fisac se la jugaron desde el 6.75, lanzando hasta en 31 ocasiones desde más allá de la línea de 3 puntos.
El encuentro fue dominado en líneas generales por Gescrap Bizkaia, aunque no pudo romperlo hasta los minutos finales. Al descanso se llegó con un 46-40 en el marcador y en los primeros minutos de la reanudación dio la sensación de que los de Katsikaris podían poner tierra de por medio y dejar el encuentro visto para sentencia (53-42, min. 24). Muy al contrario, los visitantes marcaron un parcial de 0-10 (53-52, min. 27) para devolver la igualdad en un marcador que no se desnivelaría hasta los minutos decisivos. Con 72-70 y menos de 5 minutos para el final, Kostas Vasileiadis taponaba a Kirk Penney, que inmediatamente cometía una falta calificada como antideportiva por el trío arbitral. Los locales lo aprovecharían a la perfección: dos tiros libres del heleno y un triple de Raül López (10 puntos y 5 asistencias), otra vez fundamental en los minutos calientes, situarían en el marcador el 77-70. Los de Fisac, con todo cuesta arriba, no se rendirían y obligarían a los bilbaínos a trabajar la victoria hasta el último suspiro. Sin embargo, todos los tiros exteriores que antes no lograron anotar los vascos entraron en esta recta final e hicieron estériles los intentos de remontada fuenlabreños. Al final, los de Katsikaris incluso lograron superar el basketaverage negativo que trajeron del Fernando Martin para acaba superando a sus rivales por 92-81. Un triunfo, visto el contexto en el que se logró, que sería calificado como "el más meritorio de la temporada" en palabras de Fotis Katsikaris.
Porfi Fisac en Sala de Prensa (Dpto. de Comunicación de Bilbao Basket):
Fotis Katsikaris en Sala de Prensa (Dpto. de Comunicación de Bilbao Basket):