En todo el entramado de especulaciones y rumores del mercado Euroliga hay un elemento en común: varios jugadores se encuentran entre los objetivos de diferentes equipos. Sucedió en el caso de Vasilije Micic, que finalmente se decidió por la oferta de Hapoel Tel Aviv, o, por ejemplo, se puede ver con Procida, que se hará oficial por el Real Madrid en los próximos días. Una sección de baloncesto blanca que sigue con tres objetivos de mercado, pero en uno de ellos se entromete de manera directa Fenerbahce, a la espera de saber qué sucede con Lonnie Walker IV y Chuma Okeke.

Anthony Gill: ¿Real Madrid, Fenerbahce o NBA?

Ese tríptico de opciones es el que tiene en estos momentos el ala-pívot natural de North Carolina, formado entre South Carolina y Virginia de NCAA, con un total de 234 partidos en la NBA, siempre con Washington Wizards. La franquicia de la capital decidió cortar a final de junio al jugador de 32 años después de vestir la camiseta de Wizards desde 2020.

Gill se convirtió en un tipo de pegamento, particularmente para el equipo, pero también en el vestuario. Si bien no contribuyó mucho estadísticamente, ciertamente ha sido un jugador de equipo que hizo todas las jugadas correctas en el momento adecuado. Sirvió como el mentor perfecto para el equipo. Ahora busca el siguiente paso en su carrera, con un objetivo claro: permanecer en la NBA.

El Real Madrid es uno de los equipos que monitoriza desde hace días la posibilidad de incorporar al jugador estadounidense al roster blanco de la temporada 2025-26. Sin embargo, en los últimos días, Fenerbahce se incorpora entre las opciones del fichaje, más tras ver cómo Filip Petrusev pondrá rumbo al proyecto megalítico del Dubai BC.

Gill ha promediado tres puntos y un rebote a lo largo de su carrera en la NBA, con un mapa de tiro del 49%. El de High Point sigue como agente libre y todo parece indicar que, pese a las opciones de Real Madrid, Fenerbahce e incluso Olympiacos, el cuatro esperará una nueva llamada y permanecerá en Estados Unidos. Quedan semanas por delante del mercado de la agencia libre.

Pasado en Europa por Yesilgiersun y Khimki

Tras su periplo por NCAA, Gill no fue drafteado por ningún equipo NBA en 2016 y de los Cavaliers de Virginia puso rumbo al profesionalismo de la mano de Yesilgiresun de la liga turca. Sus notables números le valieron el contrato por Khimki y en el conjunto de Moscú estuvo tres temporadas, siempre con promedios entre los 10 y 13 puntos, además de añadir siempre cinco rebotes por encuentro.

En las próximas semanas se conocerá el futuro del jugador pretendido por el Real Madrid; sin embargo, con su alto coeficiente intelectual de baloncesto y su tutoría con jugadores jóvenes, podría ser un fichaje interesante en un papel secundario de una franquicia contender de la NBA.