Antonie Rigaudeau ve llegar el final de un largo calvario y afronta los últimos días antes de su vuelta a las canchas con la camiseta del Pamesa Valencia tras medio año de rehabilitación de su lesión en el pie izquierdo. Esta lesión le obligó a pasar por el quirófano el pasado mes de septiembre y le ha impedido disputar partido oficial alguno esta temporada.
El internacional francés, que ya ha realizado durante esta semana los primeros entrenamientos tácticos con el resto del grupo desde que fuese intervenido de la inflamación en la zona calcánea del tendón de Aquiles del pie izquierdo, queda a disposición de Chechu Mulero ante el encuentro que el Pamesa Valencia disputará el sábado (18 horas, en directo por LP TeVA) en La Fonteta ante el Caja San Fernando.
Pese a que la evolución en la rehabilitación de Rigaudeau resultaba difícilmente previsible dada su complejidad, ésta finalmente se ha ajustado dentro de los plazos establecidos y se ha prolongado durante 6 meses de duro trabajo y sacrificio.
Así fue el proceso de rehabilitación
La rehabilitación de Antoine Rigaudeau, llevada a cabo por los servicios médicos del Pamesa Valencia, contó de 3 fases básicas, según explica Josep Benítez, coordinador del área de Salud del club taronja:
La primera fase fue la habitual en el ámbito post quirúrgico, de unos dos meses de duración y consistente ante todo en disminuir la inflamación.
A partir de ahí, y en los dos meses siguientes, se iniciaron los trabajos de movilidad y aquellos con el objetivo de ganar resistencia y fuerza.
Los dos últimos meses se dedicaron a la readaptación al esfuerzo, carrera y salto, primero en superficies blandas, después en medias y finalmente en parquet. Ésta fase fue la más compleja, ya que hubo de combinarse con la lógica dosificación de esfuerzos.
Antoine Roger Rigaudeau (17/12/71) firmó por el Pamesa Valencia en el verano de 2003. En el tramo final de la pasada temporada su dolencia, denominada Enfermedad de Haglund, se agravó y tras concluir la campaña se optó por un tratamiento conservador de ondas de choque. Finalmente, como última opción y tras comprobar que la respuesta de su talón al tratamiento no fue la óptima, fue intervenido en el Hospital Pitie-Salpetriere de París el día 15 del pasado septiembre.