A ella pertenecen los jugadores que cumplen su primer año como sénior, tras concluir su etapa júnior. Es la generación que nos trajo una medalla de bronce en el pasado campeonato de Europa U18 en Grecia. De aquella selección, además de Aguilar, tres son los jugadores nacidos en 1988 que están disputando la ACB con una presencia bastante reducida en lo que a minutos en cancha se refiere: Richard Nguema, Asier Zengotitabengoa y Víctor Claver.
El Real Madrid de Joan Plaza, ante la lesión sufrida por Raúl López hace unas semanas, no dudó en echar mano del joven base Richard Nguema. Si bien se trata de un refuerzo ocasional, su aportación fue notable en la victoria de su equipo ante el DKV. Mientras, continúa su formación en el filial del conjunto blanco en LEB-2.
El segundo caso lo encontramos en el del jugador formado primero en la cantera del Barça y después en la del Pamesa: Asier Zengotitabengoa. El alero vasco, tras un difícil año en Pamesa, recaló en las filas del Lagun Aro Bilbao Basket, jugando primero en el conjunto vinculado del Santurtzi de liga EBA durante la pasada campaña, para pasar a formar parte del primer equipo en muchos de los encuentros de la presente temporada, el último frente a su ex-equipo, el Pamesa Valencia. A la espera de ganarse minutos con su progresión, Asier sigue jugando con el Santurtzi en liga EBA siempre que sus compromisos con el ACB se lo permiten.
Tras finalizar su etapa júnior, Claver firmó un contrato profesional con el Pamesa, lo que le convertía en miembro de pleno derecho del primer equipo. En Valencia, ciudad poco acostumbrada a ver florecer jóvenes valores de la cantera del Pamesa, y menos nacidos en la tierra, se generó ilusión a nivel de aficionados y prensa por ver jugar a este espigado alero de 2.05 que tanto ha destacado en las categorías de formación.
Sin embargo, tras 17 jornadas y casi cuatro meses de competición, ninguno de los dos entrenadores que ha tenido Pamesa hasta la fecha le ha dado mucha cancha al joven jugador. Primero fue Ricard Casas quien durante las cinco jornadas que estuvo al frente de Pamesa limitó su tiempo de juego a seis minutos en dos partidos. Ahora, Fotis Katsikaris tampoco lo utiliza en los partidos del Pamesa, salvo contadas ocasiones. Pero existe una gran diferencia con sus otros dos compañeros nombrados anteriormente, y es que Claver no juega minutos en ningún otro equipo y su progresión se limita a los entrenamientos.
Así lo explica Fotis Katsikaris
Así pues, la gente se pregunta: ¿por qué no juega Víctor Claver? Una y otra vez suena esta pregunta cada vez que Fotis Katsikaris comparece ante los medios de comunicación en las ruedas de prensa post-partido; y, una y otra vez, el griego contesta lo mismo: “Claver debe ganarse sus minutos en los entrenamientos.”
El entrenador de Pamesa asegura que “tenemos que ser muy cuidadosos con los jugadores jóvenes. Víctor está haciendo un muy buen trabajo y nosotros hablamos y él entiende que es lo que tiene que hacer. No se trata de hacerle jugar treinta segundos cuando el partido esté resuelto, sino que tiene que llegar en el momento en el que juegue minutos de calidad.”
Se ha hablado mucho en la prensa local del descontento de Katsikaris con los entrenamiento de Claver, en los que Katsikaris le pedía que estuviese más concentrado, que entrenase con más intensidad. Ahora el técnico reconoce que “las últimas tres semanas está trabajando muy bien. En estos momentos está en un momento en el que está creciendo, dando el paso de ser un jugador joven a ser un jugador maduro.”
Finalmente, el técnico de Pamesa tiene claro que “Víctor está aprendiendo a jugar baloncesto ahora. Es importante que aprenda a jugar con buenos jugadores con buenos sistemas y entonces puedes ver cuán fuerte puede formarse como jugador. Esto es lo que creo y lo digo por experiencia y creo que el club está de acuerdo.”
Así pues, la afición de Pamesa tendrá que tener paciencia para ver a Víctor Claver destapar todo su potencial en ACB mientras prosigue su evolución… en los entrenamientos. Se trata, sin duda, de uno de los jugadores con mayor potencial de nuestras canteras; en él están depositadas muchas esperanzas de futuro y es inevitable plantearse preguntas: ¿Se está frenando su progresión? ¿Debería tener minutos cedido en otro equipo? ¿Cuándo llegará el día en el que pueda mostrar todo su potencial? De momento, habrá que ser pacientes.