ARTICULOS RELACIONADOS:

  • Proyecto Assignia Manresa 2011-12
  • Proyecto Asefa Estudiantes 2011-12
  • Proyecto Bizkaia Bilbao Basket 2011-12
  • Proyecto CAI Zaragoza 2011-12
  • Proyecto Cajasol-Banca Civica 2011-12
  • Proyecto Lucentum Alicante 2011-12
  • Proyecto UCAM Murcia 2011-12

Talento, ilusión, compromiso y continuidad son los cuatro pasos que ha de cumplir el Real Madrid para volver a la cima del baloncesto nacional y continental. Los dos primeros, parecen seguros, pero la dificultad de engranar a ellos los dos últimos siempre fue ardua tarea.

Tras haber llegado a la ‘Final Four’ de la Euroliga más de una década después y habiendo rozado el título copero, que no se consigue desde hace casi dos, las sensaciones son ilusionantes. El crecimiento es real pero el último paso hacia la gloria siempre es el más difícil.

Pablo Laso, conocedor de la casa, ha sido el hombre elegido para llevar este proyecto de las alturas a la cima. Sus argumentos, un equipo que conjuga grandes dosis de talento y juventud, lo cual puede ser al mismo tiempo bendición o perdición. Este Real Madrid carece de experiencia competitiva al más alto nivel, por ello es especialmente importante la labor del técnico, que debe hacer crecer a sus jugadores y al equipo de forma paralela.

La llegada de Rudy Fernández, con la peligrosa duda de hasta cuándo, es la gran guinda a una plantilla muy poderosa y con un terrible hambre de triunfo. El Real Madrid quiere regresar y está sentando las bases para ello.

La plantilla para la temporada 2011/2012 es la siguiente:

Bases: Sergio Llull

Posiblemente la posición que más dudas provoque en el nuevo Real Madrid. El canario Sergio Rodríguez (1.90, 25 años) cumplirá su segunda temporada en el club blanco con el deseo de, una vez adaptado de nuevo al baloncesto continental, aprovechar todo su potencial y recordar al joven que en sus inicios maravillaba Europa.

Eléctrico en su movimiento, la mejor virtud del ‘Chacho’ continúa siendo su talento en la creación y capacidad de ejecución del pase, especialmente explotada en el juego a campo abierto, situaciones en las que se convierte en un maestro. Cada vez más sólido en sus prestaciones defensivas y más fiable en su lanzamiento exterior, Rodríguez tratará de abandonar la sensación que le persigue de ser únicamente un jugador para determinados momentos de los partidos, buscando la consagración como un base de referencia en el baloncesto FIBA.

Y es que Sergio Rodríguez sigue siendo un jugador muy emocional, que si se encuentra cómodo, disfrutando sobre la cancha, puede ser realmente determinante. Pero si no… tiende a desaparecer. Será Pablo Laso el hombre que deba conseguir que la confianza despeje todos sus enigmas internos, dando paso al aprovechamiento eficiente de las enormes condiciones del jugador.

Hasta ahí, bien. Pero la novedad, la apuesta del conjunto madridista, será Sergio Llull (1.90, 23 años) como base. El menorquín, que llega tras haberse proclamado campeón de Europa con la selección española este verano, es un jugador contrastado pese a su juventud, santo y seña del madridismo por sus características y su voraz carácter competitivo.

Sin embargo, existen dudas sobre su rendimiento en el puesto de ‘uno’. Laso ha apostado decididamente por él pero se trata de un jugador cuya evolución parece indicar justo lo contrario. Es decir, que cada vez ofrece menos garantías como base y más como escolta.

Llull es pura energía sobre la cancha, intensidad y nivel defensivo, potencia a campo abierto. Pero la lectura del juego no está entre sus virtudes. Tampoco destaca por su excelente manejo de balón y, lo más relevante, necesitará siempre de un generador de juego a su lado para hacer funcionar al equipo. El balear no es un director de juego al uso, por lo que se antoja arriesgada una apuesta que defensivamente no ofrece dudas, pero ofensivamente puede suponer un paso previo para autocondicionarse.

Valoración Solobasket: 7.5

Escoltas: Jaycee Carroll

Pura dinamita. El Real Madrid cuenta con una pareja de escoltas de un nivel superlativo. Los dos recalan en el club este curso y generan una enorme ilusión. Principalmente Rudy Fernández (1.96, 26 años), la gran atracción del proyecto y el fichaje más importante de la Liga Endesa hasta el momento.

El mallorquín vuelve a Europa tras tres años en la NBA, más sombríos que luminosos. Pero lo hace con una cláusula de salida en caso de que el lockout se desbloquease, por lo que no hay seguridad alguna de que Rudy pueda permanecer en el Real Madrid toda la temporada. El peligro, por tanto, es que el jugador deba abandonar el equipo mediada la temporada, dejando ‘huérfana’ la posición y, sobre todo, dejando un hueco casi insustituible en el equipo, dado el nivel del internacional español.

Aparte de todo lo que supone mediáticamente la llegada de Rudy, en la parcela puramente deportiva es una incorporación extraordinaria. Estamos hablando de un jugador que apuntaba a dominar Europa antes de marcharse a Estados Unidos, por lo que ahora, más formado y maduro en su juego, puede ser, sin duda, uno de los exteriores más determinantes del continente. Magnífico anotador y tirador, posee una gran interpretación del juego, además de poderío físico y actividad defensiva. Rudy Fernández en Europa es un jugador total, capaz de aportar en todo y liderar un proyecto ganador.

Su compañero en el puesto de escolta no es ni mucho menos un desconocido. Jaycee Carroll, Mejor Escolta de la última temporada en la ACB y Máximo Anotador los dos años que ha estado en España, es toda una garantía ofensiva.

En sus dos años en Gran Canaria, Carroll demostró ser un anotador de primerísimo nivel, destacando sobre todo en el lanzamiento exterior. En Madrid deberá aprender a desempeñar un rol más secundario y aprovechar su espacio en el equipo. Es la única duda, la de la adaptación a un papel más limitado, que puede generar un escolta de tan contrastado nivel y brillantes condiciones.

Valoración Solobasket: 9.5

Aleros: Martynas Pocius

El puesto de alero mantiene un referente y recibe otro que puede llegar a serlo, creando una pareja joven, complementaria y con un importante margen de progresión.

Carlos Suárez (2.02, 25 años) parte con vitola de titular. Tras un gran inicio el curso pasado, dejando inmejorables sensaciones de adaptación a su nuevo equipo, Suárez se adentró en una dinámica negativa de la cual no supo escapar la segunda mitad de la campaña, en la que bajó sus pretaciones de manera preocupante.

Con confianza, Suárez lo tiene todo para ser una referencia en el Real Madrid. Un alero poderoso físicamente, móvil, fantástico tirador y que carga muy bien el rebote, sobre todo ofensivo. Además, estará con ganas de reivindicar su nivel tras haberse quedado fuera del Europeo, por lo que es de esperar a un Suárez hambriento de éxito este curso, con el horizonte final de los Juegos Olímpicos.

El otro alero del equipo será el lituano Martynas Pocius (1.96, 25 años), procedente del Zalgiris Kaunas. Su presencia dará un gran equilibrio en cancha, al tratarse de un jugador físicamente explosivo, buen defensor y capaz de aportar en numerosas facetas.

Pocius, muy polivalente y que podría jugar puntualmente de escolta, supone un gran complemento para Suárez. El báltico es una interesante baza para incrementar el ritmo y nivel físico de los encuentros, por lo que no necesitará gran cantidad de minutos para aportar al bloque.

Valoración Solobasket: 8.5

Ala-Pívots: Felipe Reyes

Laso dispondrá de un juego interior profundo, de gran calidad y diferentes características. Comenzando por el puesto de ala-pívot, en el que dos jóvenes de inmenso talento compartirán minutos con el eterno Felipe Reyes.

La eclosión de Nikola Mirotic (2.08, 20 años) el pasado año focaliza objetivos. Hay pocas dudas sobre las cualidades del joven jugador, de origen montenegrino, que este verano se paseó en el Europeo Sub 20, llevando a España a lo más alto del podio y siendo designado como MVP, después de un torneo escandaloso.

Mirotic, Mejor Jugador Joven de la Euroliga el pasado curso, posee unas condiciones físicas y un conocimiento del juego, tanto en poste alto como en poste bajo, que asusta para su edad. Uno de los mayores diamantes del baloncesto continental ha de ser, sin duda, referente en el Real Madrid.

El año pasado dejó innumerables muestras de su talento pero éste se espera una mayor continuidad y relevancia. En definitiva, un paso adelante de un jugador que domina prácticamente la totalidad de facetas del juego y está llamado a marcar época en el club.

Con impaciencia se espera también la irrupción de Novica Velickovic (2.05, 24 años). El serbio, que cumplirá su tercera temporada en el equipo blanco, no ha exhibido su verdadero nivel regularmente y llegó a rumorearse incluso su salida, tras una última campaña en la que tuvo muchos problemas, al no encontrar su sitio en el equipo.

Ahora, con la certeza de que abandonará las pruebas como ‘falso tres’, Velickovic parece contar con la plena confianza de Laso para demostrar su tremendo potencial y ganarse minutos de relevancia. Desde luego talento no le falta para ello.

Acostumbrado de sobra a jugar minutos y partidos importantes, Felipe Reyes (2.04, 31 años) será, un año más, importante en el Real Madrid. El jugador más veterano de la plantilla tendrá este curso una doble función, no sólo ya como jugador sino también a la hora de cohesionar un grupo muy joven y hambriento de éxitos.

Su polivalencia interior y su ejemplar ética de trabajo hacen de Felipe Reyes un valioso comodín para cualquier técnico. En su octava temporada como madridista, el capitán volverá a ser un seguro de vida.

Valoración Solobasket: 9.25

Pívots: Mirza Begic

Tamaño, mucho tamaño; y talento, mucho talento. Ante Tomic y Mirza Begic, dos pívots de la escuela balcánica, serán los encargados de ofrecer seguridad interior al equipo, por lo que previsiblemente deberán centrarse, sobre todo, en su capacidad defensiva.

Ante Tomic (2.17, 24 años) es una delicia. Un estilista de la zona con capacidad para dominar los partidos. En ataque, su presencia es una mina de opciones para su equipo, porque además de finalizar de forma excelente cerca del aro, interpreta bien el juego.

Sin duda donde más ha de trabajar es en el aspecto defensivo, ya que no hace valer sus 2.17 metros tanto como debiera. Es un jugador blando, con ciertas deficiencias de intensidad y tendencia a ser intermitente. Por ello, el gran reto de Laso es conseguir endurecer a Tomic y conseguir que adquiera el nivel de regularidad que puede hacer de él un pívot de absoluta referencia en Europa, en todos los niveles.

De similar perfil, eminentemente ofensivo, es su compañero Mirza Begic (2.16, 26 años), que llegó al club a mediados del pasado curso y apenas tuvo oportunidades para demostrar su nivel. Quizás pudo sorprender su actuación en el Europeo con Eslovenia, en la que dejó numerosos detalles de jugador muy influyente en el juego. Pero realmente lo único que evitó que pudiera mostrarlos en el Real Madrid fue la falta de confianza y minutos.

Ahora Begic podrá empezar la temporada, conocer mejor el trabajo de su técnico y adquirir relevancia en el bloque. Al igual que Tomic, la garantía defensiva marcará la diferencia en el rendimiento que pueda ofrecer el esloveno, puesto que condiciones físicas y técnicas le sobran.

Valoración Solobasket: 8.5