Resultados de la jornada
| Jornada 4 | Resultados |
| Adecco Estudiantes – F.C. Barcelona | 66 – 67 |
| CB Granada – Lagun Aro Bilbao Basket | 78 – 77 |
| Unicaja – Casademont Girona | 79 – 87 |
| Leche Río Breogán – Plus Pujol Lleida | 72 – 80 |
| Gran Canaria – Real Madrid | 54 – 79 |
| Fórum Valladolid – Ricoh Manresa | 91 – 84 |
| Caja San Fernando – Etosa Alicante | 81 – 109 |
| Tau Cerámica – Unelco Tenerife | 78 – 67 |
| DKV Joventut – Pamesa Valencia | 78 – 85 |
¿Nos hemos quedado ya con una liga de cuatro?
Al que suscribe estas lineas se le agotan las ideas a la hora de redactar este resumen, ya que uno mira la clasificación y tiene la sensación de que nada ha pasado, de que está mirando la de la jornada anterior y alguien ha añadido un numerito más a cada equipo.
Y eso que esto no ha hecho más que empezar, quedan 30 jornadas de emoción, victorias, derrotas,… ¡qué digo! como esto siga así nos quedamos sin liga en dos jornadas más. Bueno, tampoco hay que ser pesimista, era una exageración. Si bien es cierto que han vuelto a ganar los cuatro de arriba y que, como escribe nuestro buen amigo Jinete en el remozado foro de Solobasket ,”Ea, ea, los grandes se pasean” es de esperar que Unicaja, Pamesa o Estu resuciten y que alguien sea capaz de pararles los pies a los cuatro grandes.
¿Cuatro grandes he dicho? Caramba, ¿pero el Etosa no es ese equipo que vivió uno de los capítulos más agónicos y la vez apasionantes de la temporada pasada al evitar el descenso en la última jornada? Sí, son ellos. Trifón Poch sigue en la línea ascendente que marcó para dicha salvación y ha convertido a los otrora denostados De Miguel y Junyent en dos pívots de garantías. Si a esto le sumamos la aportación estelar de Quincy Lewis y la no menos importante del resto… ¡voila! Invictos y apuntando alto.
Ya muy lejos -vaya, otra vez con el pesimismo, se nota que es lunes- se encuentra un nutrido grupo con el balance al cincuenta por cién. Gran Canaria, Caja San Fernando y DKV, los tres conjuntos que podrían haber contado con tres victorias actualmente, dejaron pasar en casa la oportunidad de haberse destacado de este pelotón. Por allí pasaron los ciclones madridista y alicantino y un desconcertante Pamesa, que lo mismo pierde en casa de 37 que gana fuera con solvencia.
Buscando su identidad
Mirando ya más abajo nos encontramos al grupo de los indecisos. Los del “no sé quién soy ni a qué juego”. En este estado parecen encontrarse los chicos de Sergio Scariolo, superpotencia del basket europeo a priori, decimotercero de la Liga ACB por ahora. Así, con una nueva derrota, en casa y contra un equipo que no había ganado aún, se une al Estudiantes para hacer reflexión conjunta y pensar en la necesidad de una mejora inmediata para no perder eso que llaman el tren de la Copa.
Y ese equipo que se llevó el triunfo de Málaga no fue otro que el Casademont Girona que ha abandonado al Unelco Tenerife en el pozo de la tabla. Los de Aranzana no lo tenían fácil, jugaban en Vitoria, y tendrán que esperar una jornada más para intentar estrenarse.
Duelo de recién llegados
En Granada se vivió un apasionante partido entre los dos equipos recién ascendidos de LEB. El Lagun Aro rendía visita a Granada con la intención de seguir con la trayectoria iniciada de perder en casa y ganar fuera. No pudo ser, una inesperada prórroga torció sus planes cuando ya casi lo habían conseguido.
A Perasovic no le gusta nada perder
Eso es al menos lo que se desprende de las declaraciones que ha hecho tras la abultada derrota contra el temible Etosa, donde asegura que “el equipo se mantuvo en el partido hasta los tres últimos minutos del tercer cuarto. A partir de ahí llegaron los errores. Creo que el último cuarto nos sobró. Hasta ese momento el equipo lo intentó, pero pasó algo que no puede pasar de ninguna forma, porque dejamos de jugar en colectivo y eso nos puede pasar factura porque al final cuenta el básket average y dejamos que lograran una ventaja muy abultada. Espero que el equipo aprenda algo de lo ocurrido”, finalizó”.
A buen seguro el entrenamiento de esta tarde del conjunto sevillista no habrá sido una celebración.