Roger Grimau deja las cosas claras: “Ni éramos amigos ni lo vamos a ser”

El ex del Barça y ahora entrenador del Dinamo de Bucarest ha vuelto a hablar de su salida del Barça en el programa ‘Play Basket’ de la Cadena Ser. Roger Grimau, que sigue defendiendo que mereció más confianza en el conjunto azulgrana, quiere olvidar el pasado y centrarse en el presente y futuro, donde tiene un proyecto que liderar en Rumanía durante los próximos tres años. 

El técnico catalán ha reconocido que estaba ansioso por volver a los banquillos y no se lo pensó dos veces cuando le llegó la oferta del Dinamo Bucarest: “Llevaba meses viendo mucho baloncesto y me apetecía entrenar. De esta oferta me atrajo que me querían”. No obstante, Grimau reconoce que debería haber seguido en el Barça: “Sí, merecía una segunda temporada”.

Aunque todavía no sabe exactamente los motivos reales de su salida, y a pesar de no haber conseguido títulos, Roger Grimau cree que no se fue justo con él: “Desde el primer momento hubo mucha crítica conmigo y poca paciencia, sentía que había ganas de que no funcionase. El equipo jugó bien y muy buen baloncesto, pero no ganamos títulos”.

Roger Grimau ha asegurado que todavía le cuesta ver jugar al Barça de Joan Peñarroya y le duele porque piensa que él todavía podría estar sentado en el banquillo: “No me apetece verlos. No me sale, no puedo. No es rabia ni rencor, pero ahora mismo no puedo ver sus partidos”.

La acalorada conversación que destapó Roger Grimau con Willy Hernangómez cuando todavía estaba en el Barça dio lugar a muchos comentarios y a una polémica que con el paso del tiempo se ha ido haciendo más grande. El actual técnico del Dinamo de Bucarest ha vuelto a hablar de aquel rifirrafe: “Para mí era un jugador importante para el proyecto y actué como club. Si hubiera pensado en Roger Grimau como persona en vez de como entrenador, seguramente hubiera actuado de forma diferente”.

Roger Grimau ha querido dejar claro que no le guarda ningún odio a Willy Hernangómez, pero simplemente no hay relación entre ellos: “Desde que me fui se ha puesto mucho el foco en esto, pero para mí es algo anecdótico en cuanto a la relación con él. Ni éramos amigos ni lo vamos a ser”.

El primer balance de Roger Grimau al frente del Dinamo Bucarest no es precisamente el mejor, ya que acumula dos derrotas y una victoria en sus primeros tres partidos. El técnico catalán cayó de manera holgada en su debut contra el Oradea por 86-57 y cedió este pasado fin de semana ante el Voluntari por 69. El único triunfo que logró fue en Europa frente al Fyllingen BK.