Real Madrid 82 (20+13+32+17) – 71 Lukoil Academic (11+13+20+27)

Real Madrid 82: Victoriano (8), Herreros (10), Mumbrú (22), Fotsis (4) y Kambala (21); Bennett (10), y Antelo (7);

Lukoil Aacdemic 71: Smith (22), Pistoljevic (5), Lauderdale (10), Banev (2), y Stoykov (17); Glintic (7), Radionov (8), Koeshinov y Stoyanov.

Árbitros: Radic (CRO), Klaar (SWE) y Paternico (ITA). Eliminaron por cinco personales a Fotsis (m.37).

Crónica
El Real Madrid venció al Lukoil Academic búlgaro en un partido que los blancos dominaron de principio a fin, y están virtualmente clasificados para los octavos de final de la copa ULEB.

Los hombres de Julio César Lamas consiguieron sobreponerse a las bajas: a las ya conocidas de Reyes, Sonseca y Bueno se unió Mario Stojic quien no pude vestirse por una sobrecarga. Quien sí jugó fue José Ángel Antelo, el pívot gallego superó los nervios con los que saltó a la cancha y cuajó una buena actuación con siete puntos y los mismos rebotes en los diecinueve minutos en los que estuvo en cancha.

El Madrid comenzó basando su juego en el tiro exterior, la cosa les iba bien (7-0) sin embargo cuando no entraron esos tiros de fuera los búlgaros habían empatado el partido (11-11). La entrada de Bennett, que imprimió más velocidad al conjunto blanco, y el acierto de Kambala que poco a poco se iba haciendo el dueño dela zona, propiciaron que el Madrid cogiese ventaja que hasta el descanso nunca sería inferior a seis puntos. 33-24 al descanso.

En la reanudación al acierto desde más allá de 6.25 de Mumbrú se unieron Herreros y Victoriano, propiciando la escapada en el marcador (52-36). Una falta antideportiva señalada a Stoykov por tratar de frenar con la pierna a Alberto Herreros, unido a que Lauderdale se fuese al banquillo hizo que el Madrid se marchase en el marcador y afrontase el último cuarto con una ventaja de 21 puntos (65-44).

El último cuarto no tuvo historia y sólo las provocaciones del gigante Lauderdale a mandando callar al público del Raimundo Saporta mantenían el interés. Quizás los jugadores madridistas también se relajaron permitiendo que el Lukoil maquillase el resultado hasta el 82-71 final.

La clave:
El Real Madrid demostró ser muy superior al equipo búlgaro especialmente cuando el pívot francés Lauderdale estaba en el banquillo.

El protagonista:
Kaspars Kambala, a pesar de que tenía una difícil papeleta cumplió con creces. 21 puntos y 8 rebotes.