Según informa la web Encestando.es el capitán de Estudiantes se marcha.
Tremenda noticia para la masa social colegial, que pierde a su mayor y principal referente durante los últimos años.
La citada web publica una entrevista en la que el alero afirma necesitar un cambio tras muchos años en Estudiantes.
Asefa Estudiantes confirma que en las últimas semanas ha estado negociando con el alero, aunque sin llegar a realizar oferta formal de renovación al jugador en ningún momento.
Estudiantes se muestra sorprendido ante las declaraciones del jugador, recogidas en Encestando.es y reproducidas en otros medios. Sorprendido, a la vez que decepcionado por las formas, según recoge el Comunicado de Prensa del Club.
Un noticia sorprendente cuando todo parecía indicar a su continuidad como bastión veterano del equipo de Casimiro, que por otra parte, ya debía afrontar una considerable renovación. Pero a priori, desde el entorno colegial, no parecía se contase con tener que sustituir el “alma” del equipo. Sin duda gran parte de ella, la ponía Pancho.
Al margen de los datos y registros, el club del Ramiro pierde sin duda alguna su mayor argumento emocional en el vestuario, el mejor ejemplo del carácter y compromiso que han salvado a Estudiantes en los últimos años, como cuando el Club estuvo al borde del abismo en Granada hace varias temporadas.
Hay que remontarse a la temporada 2000-2001 para no encontrar al alero de Bahía Blanca en las filas de Estudiantes. Llegó tras pasar por Gijón, donde compartió vestuario con su compatriota Luis Scola.
Un tipo tímido que llegó sin hacer ruido a un Club que afrontaba una temporada especial con Charly Saínz de Aja en el banquillo. Con Carlos Jiménez por delante primero y a su lado después, formó una pareja de aleros que dio las mayores alegrías a Estudiantes en los años sucesivos, bajo la batuta de Pepu Hernández.
La figura de Pancho iba creciendo en Estudiantes, y alcanzó sin duda un punto difícilmente igualable en el playoff de 2004, siendo clave en el “zarpazo” colegial dado en el Buesa Arena con 13 puntos y 15 rebotes que darían el pase a la primera –y hasta el momento única- final ACB con Estudiantes de por medio.
Años felices que dejaron de serlo tanto, no solo para Jasen, sino para el Club en general. Y momentos duros en los que “Maradona” ha sido siempre un tipo fundamental en el imaginario colectivo estudiantil.
Sus números y aportación al equipo en los últimos años, presentan un ligero descenso: 13 de valoración en la temporada 2008-2009, 11 en la 2009-2010. Lógica por otra parte en un jugador que cumplió en febrero pasado 33 años y que ha cerrado la temporada regular ACB 2010-2011 con: 9.4 puntos por partido, 4.1 rebotes, 1.6 asistencias, para un 9.4 de valoración media en 23 minutos de juego.
Cifras no particularmente destacables, en un jugador que nunca se ha destacado por sus números y sí por su entrega y compromiso. Nunca fue un tirador, pero asumía el riesgo en los momentos difíciles, y con los años fue mejorando su visión y lectura del juego, así como perfeccionando su inteligente juego al poste. Este curso, sin la compañía de Carlos Suárez, y con la poco eficaz de Jiri Welsch, se ha encontrado poco acompañado en el alero.
En cualquier caso, y al margen de unas u otras valoraciones, Pancho Jasen, es indiscutiblemente uno de los jugadores más importantes de la historia de Estudiantes.
El tercer jugador que más veces ha vestido la elástica colegial tras Nacho Azofra y Carlos Jiménez –ambos excompañeros- ; y el jugador no nacido en España que más veces ha defendido la camiseta del Ramiro, superando al mítico John Pinone.