Baloncesto Sevilla está a un paso del abismo. La fase regular terminó el 22 de mayo y, desde entonces, el club no ha convocado a la prensa. Ni siquiera para hacer balance de la temporada. Se ha sumido en un profundo silencio institucional que sólo ha roto para comunicar que rechazaba la renovación del contrato de Derrick Byars y presentaba su inscripción para la temporada 2014-15. Finalizada su temporada deportiva, empezaba para Fernando Moral -su presidente y representante de La Caixa- la carrera a contrarreloj para encontrar un nuevo comprador. El banco se limitó a esperar.

El 16 de julio expiró el plazo que el contrato de venta contemplaba para que La Caixa, al no aportar Jefferson Capital Funding las cantidad exigida (500.000 euros), recuperara el club. Fernando Moral llegó a Barcelona con varias ofertas que se decían "serias" pero, cuando lo más que se esperaba era que el banco concediera un nuevo plazo para valorarlas, éste decidió desentenderse y ceder definitivamente el club al fondo de inversión y el desaparecido Jeffrey Meythaler. Si bien llegó a venderlo por la cantidad simbólica de un euro, como demostraría el diario El Mundo, esta vez La Caixa exigía a los compradores proyectos de tres años y una inversión de dos millones de euros. Resuelta su intención de no recuperar el club, lo dejaría solo ante una ampliación de capital convocada para septiembre que, de no realizarse, iniciaría el proceso de liquidación.

Frustradas las ofertas de los posibles compradores, Fernando Moral ha convocado una rueda de prensa para explicar la situación, el próximo martes a las 12:00. Por su parte, la afición sevillana ha empezado a movilizarse. Desde el hashtag #TodosConElCBSevilla, en una campaña lanzada varios días antes de llegar a esta situación, se ha convocado una manifestación para el mismo martes 21 de julio, a las 20:00 en la Plaza de San Francisco de Sevilla, ante la sede de la Fundación Cajasol.

La afición, considerada minoritaria y público de una de las canchas más frías de la Liga Endesa bajo el imperio de los dos equipos de fútbol, ha logrado difundir esta convocatoria a través de las redes sociales. Ha coincidido con el apoyo del alcalde de Sevilla, Juan Espadas, quien ha pedido al banco que colabore y conceda facilidades para encontrar una solución. La intención de esta convocatoria es hacer un llamamiento a La Caixa para que no facilite la desaparición de un histórico de la ACB, con 28 años a cuestas.