La muñeca de Wiltjer fue deterinante en los primeros instantes del choque, con tres triples atacando a la defensa del novato, de nuevo titular, Olek Balcerowski. El joven polaco y Strawberry lideraron la reacción local, en un partido intenso, con predominio de la pelea sobre las acciones combinativas y vistosas. El Granca acabó atacando mejor bajo la dirección de Oliver, mientras Unicaja perdía más balones de lo habitual y echaba de menos un referente ofensivo (22 a 19).

No consiguió Unicaja cambiar la dinámica, con varias pérdidas que ofrecieron al Granca la posibilidad de incrementar su ventaja. Gracias también al acierto de Eriksson (12 puntos en 9 minutos) en acciones individuales y anotando de direrentes partes de la cancha, algunas muy lejos de la canasta. A los jugadores de Unicaja se les veía incómodos ante la intensa defensa amarilla y además, varios de sus principales estaban teniendo un bajo rendimiento (49 a 36).

Salió más entonado Unicaja tras el intermedio, apoyándose otros dos triples de Wiltjer y en los primeros puntos de Lessort en el partido. Balcerowski y Eriksson, con un triple cada uno, sacaron momentáneamente a los suyos del atolladero, pero Unicaja logró frenar el número de pérdidas y mantuvo los buenos porcentajes de tiro. Los triples de Salin y los puntos de Lessort y Roberts ayudaron a recortar la diferencia, con un parcial de 0 a 10. El Granca no se vino abajo y reaccionó de forma espectacular con un 9 a 2 en dos minutos (69 a 59).

Casi tres minutos estuvieron los dos equipos sin anotar, hasta que llegó el pequeño duelo de tiradores. Milosavljevic, con su primer triple, abrió la lata y picó a un Marcus Eriksson en estado de gracia, que metió dos más, antes de que el serbio, que estaba haciendo un partido muy gris, metiera el segundo de su cuenta. Hannah, con sus puntos, su dirección calmada y un par de pérdidas en momentos importantes de Unicaja provocaron que el Granca llegara sin agobios al final.