El Palacio de los deportes estrenaba aspecto, ahora el rojo sustituye a los colores corporativos de la UCAM y recibía con una ovación a quien fue su ídolo durante un breve pero intenso período de tiempo, James Augustine.

El partido no tuvo mucha historia, los locales salieron mal en el inicio de los cuatro cuartos muy espesos en el ataque y con falta de precisión en el tiro. Ibón Navarro planteó un quinteto muy físico de inicio por lo que su incapacidad para anotar se vio compensada por la defensa hasta que se destapó Salin y provocó el primer tiempo muerto tras parcial de 2-8.

Otro parcial de 0-7 liderado por Shermadini y McCallum disparó a los malagueños a sus máxima ventaja 13-24. Benite apareció en el encuentro pero estas apariciones esporádicas de algunos jugadores no podían competir con el juego coral de Unicaja y los malagueños se fueron a las duchas con una ventaja de 24-33.

Pero nuevamente un mal inicio de cuarto hizo que los visitante recuperaran las rentas superiores a diez puntos hasta que Brooks en dos espectaculares acciones pusiera la máxima del partido 31-46 a falta de 4:40. Kloof fue el jugador que apareció en el tercer cuarto para evitar la debacle pimentonera pero Díaz primero con un triple y despues con un impresionante alley-oop sobre Agustine volvia a dejar las cosas en su sitio al final del cuarto 43-55.

El último cuarto fue un trámite en el que pudimos ver un par de acciones interiores de Delía en conexión con Hannah, las únicas del partido, y en el que los triples de Oleson maquillaron el resultado de un partido que siempre tuvo en sus manos el conjunto malagueño.