Noche de duelo en el Wizink Center. Segundo contra tercero, al albor y al calor de una nueva Copa que comienza aquí mismo el próximo jueves. Y como si de un duelo entre segundo y tercero se tratara, Randolph se ponía en modo jugón contra Poirier en los primeros minutos, con 9 y 6 puntos respectivamente para liderar a sus equipos. Vildoza con una penetración a izquierdas por encima de Tavares ponía a los suyos por primera vez por delante. No fluía el Madrid, pendiente, quizás de sus típicos arreones de segundas partes. En eso, un triple de Shields ponía +4 y la canasta de toda la vida de Huertas, +6 vitoriano, en un partido raruno de los locales delante, con run run incluido sobre las dotes de base de Prepelic, a pesar del pase de quarterback de Ayón para que Randolph hiciera su decimoprimer punto picando la bocina.
Se venían Felipe, Rudy y Carroll para intentar darle la vuelta a la cosa, pero era el silbado Prepelic el que, con cinco puntos, dejaba el parcial en la mínima expresión (24-25 min. 14). Salía bien parado del ataque de la vieja guardia blanca Baskonia y Shevon Shields se ponía a jugar para seguir mirando por detrás a los dueños de la cancha. Poquito a poco, jugada a jugada, iba subiendo intensidades el equipo de Laso y así llegaba a poner todo igualado Tavares con un 2+1 fruto de una asistencia exquisita de Campazzo.
2+1 de Tavares. 34-35 a falta de pocos minutos para llegar al descanso. #LigaEndesa pic.twitter.com/eGXTxHx48L
— #Vamos de Movistar+ (@vamos) 10 de febrero de 2019
De esa manera, con los dos equipos en la misma puntuación (37-37) se marchaban los jugadores a las cabinas, dejando todo pendiente para la segunda mitad.
De vuelta de los vestuarios, le cogía mejor aire el equipo de Perasovic a la reanudación, aunque nadie tomaba distancias de dos posesiones. Se afilaban las piernas blancas y se vaciaban los pulmones azulgranas, pero ahí seguía Baskonia, aguantando el desgaste. Les daba, por ahora, para ponerse incluso por delante, con dos libres de Huertas (49-50 min. 27). Taylor aprovechaba las rotaciones exteriores visitantes, obligadas a jugar con dos bases por la cuarta falta temprana de Janning y con un 2+1 daba un poquito de aire a los suyos en el acta. Hasta Prepelic defendía y sacaba faltas en ataque, para llegar a la última pausa con la máxima ventaja local: 57-52.
Ya no le salía a Huertas la jugada de toda la vida y dos pillerías de Rudy, con asistencia para el triple del hasta ahora tímido Carroll, hacían saltar las primeras alertas graves del partido (62-52 min. 32). Se le acababa el apocamiento al de Wyoming para hacer explotar a su equipo y conjurar el plan de lima, a pesar de los mates de Voigtmann. Llegaba a la séptima vida el carácter Baskonia, con un cuasi triple de Hillard, para dejar la desventaja en -5 para los suyos a falta de tres minutos. No atinaba Carroll con sus triples y la distancia se quedaba en 76-73 después del tiempo muerto de rutina televisiva. Hasta ahí le daba a Baskonia. Un triple errado y una pérdida, permitían a Randolph sentenciar una victoria de eso, de puro debilite, de puro desgaste.