Aunque iba sobreaviso, a Fuenlabrada le pillaron los primeros puntos de prepelic aún preguntándose desde donde había lanzado la carrera o cómo había conseguido levantarse tan rápido. El ’10’ de Badalona sumó los primeros 3 puntos y fue durante toda la primera mitad un dolor de cabeza constante para lo locales lanzando al 71% de acierto desde más allá de los 6,75. Necesitaba muy pocos segundos de balón para producir y eso hizo que Fuenlabrada se perdiera en el arranque en los intercambios y los movimientos sin balón de Joventut. Los de Durán se iban rápido a un 0-9 que frenaba Cuspinera con un tiempo muerto. Las rotaciones exteriores le dieron a Fuenlabrada otra vez resuello sobre la presión a media cancha de Joventut y aparecieron los primeros aciertos para los locales, que redujeron un 9-18 a un 15-20 y a un definitivo 21-24 al final del primer cuarto en un partido que arrancó durante sus primeros 5 minutos a un ritmo altisimo pero que luego se fue regulando y frenando cuando el acierto exterior bajaba.

Ya en esos primeros compases se habían erigido en dos bastiones para la anotación de Fuenlabrada Marc García y sobre todo Alex Urtasun, los anotadores más en forma en los últimos partidoss para Cuspinera. De la muñeca de estos, de hecho, y de un par de aciertos de Nico Richotti llegó la reacción local en el segundo cuarto que colocó a Fuenlabrada por única vez por encima en el electrónico (32-30). Comenzó a buscar entonces Joventut soluciones desde otras zonas del parqué, como la pintura, donde solo había buscado a los exteriores en cortes y puertas atrás, y ahí encontró esta vez a Omic, que superó en la mayoría de los duelos a Mockevicius e hizo que Joventut volviera a colocarse por encima en el marcador instantes antes de que Prepelic volviera a hacer aparición con dos aciertos consecutivos desde el triple que volvían a poner tierra de por medio (39-46) y un último desde muy lejos que mandó el partido al túnel de vestuarios (46-53).

Ajustó Fuenlabrada la variable Prepelic a la salida de vestuarios con asignaciones alternativas en esa marca, siendo Tomás Bellas la que finalmente durante más minutos resulto efectiva. Joventut, sin embargo, se repuso a eso con juego de pick and roll, sumando en este período 6 puntos Nikoz Zisis y hasta 7 Alen Omic para volver a mandar la ventaja por encima de los 10 tantos (50-60) tras apenas 3 minutos y medio desde la reanudación. Los de Durán se instalaron sobre esa decena cómodamente ante un Fuenlabrada frustrado desde el triple, pero que consiguió encontrar en Osas Ehigiator na solución a sus problemas interiores para defender a Omic y, en general, para controlar un rebote que durante la primera mitad había controlado Joventut (10-21) y que con la entrada del sevillano se fue igualando (33-36 final).

De nuevo, como ya sucediera ante Manresa, un cambio defensivo a un zonal mixta, esta vez 1-2-2, sirvió para que Fuenlabrada encontrara de nuevo ese algo en lo que agarrarse para dar el arreón al que ya tiene acostumbrada a su grada, que no abandonó al equipo aún yendo 12 por debajo a 4 minutos del desenlace. Con esa defensa consiguió Fuenlabrada que los exteriores comenzaran a chocarse contra la zona local y obligó a Durán a colocar a dos ‘4’ en las esquinas como Morgan y Harangody que, sin embargo, no consiguieron encontrar aciertos en esos instantes. Con ese cambio atrás y un Urtasun dominante en el otro lado, tanto en la anotación (19 puntos) como en la distribución y, especialmente en las situaciones de pick and roll, Fuenlabrada consiguió forzar el partido a otro final apretado donde, esta vez, la moneda no cayó de su lado aunque estuvo bastante cerca en varias ocasiones, como el 2+1 que no fue para Urtasun o un último tiro con 7 segundos en el marcador que no consiguió llegar a levantar gracias a una notable defensa los visitantes.