Toronto llegaba a su tercer partido con la soga al cuello, pero su orgullo supo mantenerle en el partido y resolverlo en un tiro de bajísimo porcentaje que, en el momento más oportuno, entró. Por su parte, los Clippers sacaron su carné de aspirantes al título metiendo miedo a Denver… y a los Lakers.

BOSTON CELTICS 103 – 104 TORONTO RAPTORS (2-1)

Los vigentes campeones no lo fueron el año pasado por tener más recursos que otros equipos, sino por una combinación de optimización de recursos y un carácter ganador que les hacía creer que eran capaces de obrar lo imposible, o por lo menos lo improbable. La situación estaba en ese punto en el día de hoy, con un 2-0 en contra y unas sensaciones aún peores.

El partido comenzó con los canadienses por encima, pero a partir del segundo cuarto Boston empezó a tener pequeñas ventajas en el marcador, aunque Toronto hacía la goma e impedía que dichas ventajas fueras superiores a 10 puntos. Sin embargo, una reacción en el tercer cuarto permitió que los Raptors dieran la vuelta al marcador y llegáramos al último cuarto con las espadas en todo lo alto.

El último periodo fue de infarto. A falta de tres minutos un mate de Jaylen Brown tras un corte ponía a los Celtics 4 arriba, tras lo cual pasó un minuto sin que ninguno de los dos equipos encontrara el aro. Lowry y Brown anotaban debajo de la canasta y Siakam fallaba la siguiente posesión. Parecía que el partido se le iba a Toronto, pero su rival tampoco resolvió en la siguiente posesión. Aún había esperanza. Era de nueva Lowry quien, mediante una certera penetración, recortara distancias y, tras otro ataque fallido de Boston, fue VanVleet quien, otra penetración mediante, colocara el empate en el marcador a falta de 21 segundos. Boston parecía acongojado, había fallado sus últimos ataques, pero una genialidad de Kemba, que supo atraerse a toda la defensa para dar un certero pase que dejó solo a Theis bajo el aro, daba dos puntos de ventaja a Boston a falta de 0,5 segundos.

La suerte no sonreía a Toronto de nuevo, los Celtics ya festejaban su virtual pase a las Finales de Conferencia, pero no contaban con la pizarra de Nick Nurse y la puntería de Anunoby, quien tuvo que armar un rápido lanzamiento desde la esquina ante la oposición de Jaylen Brown. Un tiro que rara vez entra, pero lo hizo en esta ocasión, lo que deja a Toronto con opciones en la serie y la moral por las nubes para buscar el empate en el siguiente partido.

Horrible partido de Tatum en Boston, con 15 puntos y 5/18 en tiros de campo. El joven alero de los Celtics debe ser más regular si quiere entrar en el Olimpo de las grandes estrellas de la liga. Lowry y VanVleet fueron los mejores de los Raptors, con 56 puntos entre ambos, y se echaron el equipo a las espaldas en los momentos difíciles.

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LOS ANGELES CLIPPERS 120 – 97 DENVER NUGGETS (1-0)

Si la emoción caracterizó el primer partido, el segundo careció totalmente de ella. Los Nuggets aguantaron un cuarto a los Clippers, que rompieron el partido en el segundo y se dedicaron a administrar su gran ventaja en la segunda mitad. En el primer cuarto Jokic llevó la batuta de los ataques de Denver y mediante el juego al poste bajo o distribución del balón a los compañeros lograba resolver los ataques de los Nuggets. Pero todo cambió en el segundo cuarto.

Después del final del primer cuarto empezaron a entrar los jugadores de banquillo y ahí los Clippers demostraron que, en la guerra de desgaste, gana el que más recursos tiene y ellos los tienen de sobra. Lou Williams, Harrell y JaMaychal Green mantenían el nivel de los titulares, con lo que la ventaja de los angelinos se iba agigantando. Sin comerlo ni beberlo, los Clippers ya mandaban por 18 puntos al descanso y Denver no pudo, ni se planteó, reducir esa desventaja para tener opciones. Tras un partido de infarto hace dos días y una serie previa en la que se vio sin posibilidades de vencer, los Nuggets no tuvieron fuerzas para intentarlo y arrojaron la toalla antes de tiempo.

Kawhi volvió a ser un martillo pilón que golpeaba a los Nuggets jugada tras jugada. 29 puntos y 12/16 en tiros de campo. El resto del equipo estuvo a la altura, especialmente Paul George y Marcus Morris (sin partidos de sanción) con 19 y 18 puntos respectivamente. Denver debe reaccionar o la serie (y el puesto de Mike Malone) acabará rápido.

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