Mientras el universo NBA se prepara para una "noche de transistores" apasionante que definirá si los Lakers prolongan su temporada, la madrugada de ayer fue solo un aperitivo insulso. Parece existir una 'lucha fratricida' entre Atlanta y Chicago por evitar el quinto puesto y colarse en los playoffs como sexto. ¿Por qué? Para no enfrentarse a Miami en una hipotética semifinal de conferencia. Los Hawks cumplieron su parte del guion hincando la rodilla en casa frente a Toronto sin presentar batalla (96-113). A Al Horford le dieron vacaciones por unas molestias en su hombro izquierdo; Josh Smith solo jugó 12 minutos y vio la segunda parte como espectador debido a unas molestias en sus rodillas. Atlanta había ganado 8 de sus últimos 9 envites contra los Raptors en casa, pero ayer los visitantes se pasearon. DeMar DeRozan aprovechó la falta de ímpetu competitivo de su rival para clavar 30 puntos, mientras que su compañero de perímetro Rudy Gay también se apuntó a la fiesta con 22 puntos y 5 asistencias. Toronto concluyó el partido con siete pérdidas más pero se dio un festín de tapones (10 por solo 1 de Atlanta) en el que Amir Johnson completó una tarjeta de seis. Los Hawks jugarán esta noche en Nueva York y Chicago recibirá a Washington. Todo apunta a que Atlanta conseguirá 'su objetivo' y jugará contra Indiana en primera ronda.

La emoción del duelo entre Clippers y Portland también duró un suspiro (93-77). Lo que tardó el cuadro angelino en poner en marcha su maquinaria ante un rival dimitido desde el salto inicial y que suma 12 derrotas seguidas. Los Clippers abusaron de su rival en el rebote (51-33) y Caron Butler terminó como máximo anotador con 22 puntos. Ni Blake Griffin (16 puntos y 6 rebotes), ni Chris Paul (8 puntos y 11 asistencias) ni Jamal Crawford (8 puntos) necesitaron doblar el espinazo más de la cuenta. LAC visita hoy a los Kings. Será cuarto si gana o consigue el mismo resultado que Memphis. Víctor Claver jugó 34 minutos y acabó con 11 puntos (4/12), 5 rebotes y 3 asistencias. 

También destacamos:

  • Vuelve otro viejo rockero a Nueva York. Los Knicks han firmado a Quentin Richardson hasta final de temporada. El alero, de 33 años, ya jugó cuatro temporadas en el Madison (2005-2009).