Dos noches de competición y ya empiezan a caer las lesiones. Esa lacra que nos impide disfrutar del mejor baloncesto del mundo al 100%. Siempre es negativa cualquier lesión, pero cuando les suceden a los mejores jugadores de la liga, todavía nos afectan más.

El primero de todos en caer fue José Manuel Calderón. El base español, flamante fichaje de los New York Knicks, ni siquiera pudo disputar el primer encuentro de competición. Mientras calentaba en los minutos previos al partido, notó un pinchazo en el gemelo de su pierna derecha y se resintió de la lesión que le había tenido apartado de los dos últimos encuentros de pretemporada con la franquicia neoyorquina. El parte médico indica una recaída y un periodo de baja de entre 2 y 3 semanas.

Por su parte, Oklahoma City Thunder no gana para disgustos. Lo que sí tendrán que hacer es empezar a contratar mayor personal médico y fisioterapeutas porque a su extensa lista de lesionados se une ahora Russell Westbrook. El también base californiano, tras lograr anotar 38 puntos la pasada madrugada ante Portland Trail Blazers, solo pudo disputar 8 minutos hasta que se produjo el infortunio. Mientras buscaba una rebote tras fallar una penetración, el dedo índice de su mano derecha chocó con el hombro de Kendrick Perkins con la mala fortuna de fracturarse el segundo metacarpiano del segundo dedo. Esta lesión puede tenerle apartado de las canchas al menos 4 semanas y hasta un máximo de 6, aunque los últimos precedentes señalan que jugadores como Rondo, Danny Green o Kawhi Leonard, que sufrieron la misma fractura, se perdieron tan solo 10 encuentros.

Los Thunder ahora mismo tienen solo 8 jugadores disponibles en plantilla. Westbrook se une a una lista de 5 jugadores entre los que se encuentran Kevin Durant, Anthony Morrow y el rookie Mitch McGary. Reggie Jackson y Jeremy Lamb, que también se perdieron los dos primeros choques de temporada regular, podrían estar de vuelta para el próximo encuentro ante Denver Nuggets.

Por otro lado, en las últimas horas se han confirmado varias renovaciones en la mejor liga de baloncesto del mundo. Kemba Walker, el base de los nuevos Charlotte Hornets, celebró la primera victoria de la temporada en la vuelta de la franquicia y con la mayor remontada de su historia con un nuevo contrato bajo el brazo y un partidazo con doble canasta para forzar la prórroga y ganar el encuentro. Michael Jordan le pagará 12 millones por temporada en 4 años para hacer un total de 48 millones de dólares. Una cifra más que respetable para un jugador de su categoría y con su margen de crecimiento.

Al igual que el base, uno de los hombres grandes que defenderá la camiseta de Cleveland Cavaliers esta temporada también se encuentra a solo unos flecos de distancia de cerrar su renovación para seguir muchos años ligado a la franquicia y a LeBron James. Anderson Varejao podría firmar una extensión contractual de 30 millones de dólares por tres campañas, según informó ESPN.

Boston Celtics no ha perdido el tiempo en continuar con su reconstrucción y ha decidido prolongar los contratos de 3 de sus jugadores más jóvenes. Jared Sullinger, Kelly Olynyk y Cody Zeller seguirán ligados a la franquicia del trébol al menos una campaña más tras ejercer sus derechos de renovación sobre sus contratos de rookies.

Por último, ha habido dos jugadores que todavía no han firmado sus extensiones contractuales a falta de pocas horas para que se cierre el periodo abierto de continuidad en sus equipos. Reggie Jackson, jugador de Oklahoma City Thunder, parece preferir lanzarse al mercado de agentes libres restringidos, al igual que Enes Kanter, pívot de Utah Jazz. Ambos equipos han mostrado su voluntad de negociar con los jugadores y de que continúen ligados a sus franquicias, pero dejarán para el próximo verano este aspecto para centrarse en el juego. Aunque no lleguen a un acuerdo, serán agentes libres restringidos y tendrán un derecho preferencial de tanteo sobre ellos.