Davis y Blount desde Minnessota.
Miami, ¿crisis pasajera o temporada perdida?
Javier Torrecilla: Creo que a medida que Dwyane Wade vaya recuperando el tono, los Heat van a ir para arriba y supongo que se meterán en Play-offs, pero aun así, todo hace indicar que la situación no es pasajera y de que se trata de un equipo en claro declive. Los años no pasan en balde para un Shaquille O´Neal ya muy veterano y al que se le ve cada vez más lento, sobre todo en defensa. Por otro lado, el equipo que ganó hace apenas año y medio, contaba, aparte de con dos súperestrellas en mejor estado que el actual, con una buena pléyade de secundarios. De ellos, sólo queda Udonis Haslem, un cada vez más intrascendente Jayson Williams y un casi cuarentón como Mourning. Payton se retiró y Posey y Walker, que pese a estar bastante mal el año pasado, rindieron muy bien en los Play-offs de 2006, ya no están en el equipo y sus sustitutos no me acaban de convencer. Nunca me ha gustado Ricky Davis y poco más hay en el banquillo. No se presenta muy halagüeño el futuro a corto plazo para este equipo y tiene toda la pinta de que en los próximos años, Wade se va a ver en una situación parecida a la de Kobe actualmente: sus años de madurez en un equipo sin opciones. El efecto Shaq, supongo.
No obstante, tampoco creo que se deba dar la temporada por perdida. Confío en que ese excelente jugador llamado Wade vuelva por sus fueros y creo, sobre todo porque los puestos de post-temporada en el este van a estar “baratos”, que el equipo va a estar en Play-offs. Y si el físico acompaña a las principales estrellas, pueden dar un susto a cualquiera, aunque, hoy por hoy, repetir lo de 2006 me parece una quimera.
Meej: Definamos términos. Los Heat aún pueden levantar el vuelo (empeorar es difícil), ganar algún partido en casa y hasta pelear la última plaza de playoffs; pero si hablamos de ser una potencia en la liga, esos días probablemente han acabado. ONeal mantiene el declive evidenciado los dos últimos años, Wade no acaba de estar y los secundarios ya no aportan como antes. La única buena noticia de lo que llevamos de curso es el juego de Daequan Cook, y en las últimas fechas la aparición de The Mighty Quinn para solidificar mínimamente el puesto de base, donde Jason Williams cada vez recuerda menos al del campeonato y Smush Parker no ha florecido precisamente lejos de Los Ángeles (quién iba a decir que es más problemático aparcar en Florida). En gran medida, la temporada dependía de Ricky Davis y éste no ha respondido, qué sorpresa. Sólo queda esperar a los rumores de que Pat Riley está otra vez peor de lo suyo.
Iñigo García: No vendan la piel del oso antes de haberlo desollado. No, no solo basta con haberlo cazado, sobre todo cuando no son osos grizzlies y son osos del tamaño y pelaje de Wade, Shaquille o Riles.
Los males de los Heat se resolverán en cuanto Wade recupere el ritmo de competición y no tenga esos picos tan brutales incluso dentro de un mismo partido. Porque cuando Wade sea la amenaza que debe ser, encontrar en el poste bajo a Shaquille será más sencillo. Porque cuando sea más sencillo encontrar a Shaquille, Ricky Davis no tendrá que tomar tantas decisiones y el ataque se pondrá en marcha. Porque cuando esto ocurra, defender no será tan complicado. Y porque cuando todo funcione, no habrá tanto ruido fuera de la cancha. O lo habrá, pero porque habrá vuelto la ilusión y estarán con la vista puesta en el anillo.
Álvaro Paricio: Dicen que una retirada a tiempo es un victoria, y bien que hubiera hecho Pat Riley de haberse retirado el año pasado. Nunca confié de Riley, personalmente pensé que era un oportunista echando a Stan Van Gundy (qué curioso resulta verle ahora triunfar en Orlando) y situándose al frente de un barco que navegaba por sí solo. Desde entonces error tras error no ha sabido rodear de buenos jugadoras a una superestrella como es Wade.
El equipo es un desastre y está hipotecado para el futuro con un ONeal que logró un anillo y asaltó la banca en Miami. Desde que se fue Jordan no he visto un jugador más desequilibrante en Playoffs como Wade, pero mucho me temo que aquellos Heat y aquel Wade sólo los podré a volver en mi DVD.
David Vilares: A cualquiera le impacta ver a los Heat cerrando la clasificación de la Conferencia Este, con casi el triple de derrotas que de victorias cuando se sobrepasa ya la veintena de partidos jugados. El hecho es que si Ricky Davis es tu anotador más fiable durante la temporada, no es algo tan sorprendente.
Una reacción de los Heat pasa por una recuperación física total de Dwyane Wade. Personalmente no soy muy optimista al respecto; no es que opine que vaya a ser otro Penny Hardaway, mas sus constantes problemas y la cierta cojera que arrastra a menudo no son nada halagüeñas. Esto unido al declive de Shaquille, que sigue generando ventajas en ataque pero que resta en algunas situaciones de partido, y a la pérdida de efectivos valiosos en la consecución del anillo hacen que los de Riley estén con el farolillo. Aun así, los Playoffs en el Este están baratos, y un hipotético regreso pleno de Wade les podría meter dentro. Otra cosa es que aspiren a algo.