El Palau Sant Jordi recogía este anochecer de miércoles
el último partido de la gira perteneciente a los NBA Global Games. Tras el tremendo espectáculo que el Real Madrid ofreció a su afición,
al remontar y vencer a los Thunder de Oklahoma por 142-137 (con un Llull estelar), el turno le correspondía al FC Barcelona Lassa. Por si el morbo de un encuentro en el que un club Euroliga desafía a otro de la NBA no es suficiente, se sumaba
la expectativa por ver a Álex Abrines de visitante por primera vez.
Primer cuarto
El primer período comenzó con unos quintetos titulares algo atípicos (normal, por otra parte, a estas alturas de temporada), producto de las lesiones de Adams, por parte de los Thunder; y Rice, en el equipo blaugrana. El marcador lo inauguraba Oladipo a los 11 segundos de juego, con una bonita suspensión. Acto seguido, Oleson contestaba con un triple. Esto podía presagiar que los exteriores se hicieran con el control del partido. Sin embargo, no fue así. Los primeros minutos estuvieron marcados por un ritmo dinámico, pero en el que el Barça no encontraba puntos. De hecho, con un Kanter activo, los de Donovan se hacían con una primera, pero mínima, ventaja: 3-8. El Barcelona, haciendo gala de una buena circulación (que marcaría su juego ofensivo durante la primera parte muy claramente), poco a poco empezó a encontrar su rumbo, de la mano de Tomic y Oleson. El croata protagonizó un bonito duelo con el pívot turco de Oklahoma. Esto hizo que los culés pudieran colocarse por delante de nuevo: 15-13.
Con el duelo igualado y un equipo barcelonés muy concentrado, la tónica fue similar durante un lapso de tiempo.
Westbrook no se ubicaba sobre el parqué, condicionado por su falta de ritmo, y gracias también al esfuerzo de Peno (quien se estrenó con 5 puntos y 6 asistencias, realizando un buen papel). Se pasó, no obstante, del acierto interior, a un nuevo desacierto. Y fue así hasta los dos últimos minutos del cuarto, en el que los pequeños tomaron el mando, entrando en calor el base estrella de los Thunder,
quien dejó un matazo entrando desde el centro de la zona (tampoco hay olvidar el gran tapón de Abrines a Dorsey, en los primeros minutos del escolta sobre la pista). El conjunto estadounidense tomaba de nuevo ventajas, pero dos triples de Perperoglou y Vezenkov dejaron las cosas igualadas:
25-26.
Segundo cuarto
Durante los segundos doce minutos del choque, el Barcelona quiso demostrar que no era menos que su eterno rival, y salió a dejar las cosas claras. Refinando la circulación aún más y encontrando, en casi todo momento, buenas opciones de tiro, comenzaron a controlar el encuentro. Un gran Tomic, sumado al hecho de que Kanter y Westbrook estaban en el banquillo, así como a una sólida defensa, facilitaron un cierto despegue en el marcador: 35-28 a falta de ocho minutos. Siguió en ese sentido, con el croata a un muy buen nivel y mostrando su repertorio de movimientos al poste (Kanter no se le quedaba atrás cuando estaba en pista, pero no era suficiente).
El Barça logró dejar a los Thunder en 10 puntos durante los nueve primeros minutos, colocándose en la siguiente máxima: 45-36. Empero, y tras un tiempo muerto, los chicos NBA se lograron poner a solo dos puntos, merced a canastas de Roberson y a un triple de Sabonis al contraataque. El Barça había movido el balón de lujo y los norteamericanos se habían visto maniatados por la defensa blaugrana. Se terminaba así con un 47-45.
Tercer cuarto
Si el segundo cuarto había estado marcado por el acierto de Tomic (sus 10 puntos fueron anotados, exclusivamente, en la primera parte) y la defensa culé, los Oklahoma salieron a morder tras el descanso. De este modo, y subiendo algunos puntos la agresividad defensiva, el panorama cambió completamente. El dinamismo y la velocidad vistas en la primera parte tornaron en un juego mucho más estancado, marcado por los fallos y una buena cantidad de faltas. De esta situación los Thunder parecieron salir mucho más beneficiados. Westbrook estaba cada vez más cómodo (aunque se colocó con 5 faltas rápidamente) y se notaba que marcaba el ritmo (acabó con 12 puntos, 5 asistencias y 3 rebotes). Kanter, por su parte, sumaba poco a poco (18 puntos a estas alturas). El Barça se veía cada vez más cansado y parecía que, quizás, los visitantes podían despegarse (58-65 a falta de tres minutos, y con un parcial de 11-20). Esto, no obstante, no sucedió, y los blaugranas lograron aferrarse a una racha de acierto de Vezenkov y Claver para quedar por delante, así como al único triple de Navarro (68-67). El Sant Jordi empezaba a tomar mucho mejor ambiente, y el ex del Valencia Basket iniciaba su show particular.
Último cuarto
La diferencia de quintetos era un lastre para el equipo de Oklahoma, y aunque Lauvergne sumaba en algunas acciones, se notaba la diferencia. Esto, de todas maneras, no impidió a la plantilla americana tomar pequeñas ventajas en el inicio de período (gracias también a Oladipo, que acabó con 10 puntos): 71-76. Pero no había seguridad para ninguno de los equipos: tras una canasta de Claver y otro triple de Vezenkov (13 puntos), la situación era de empate, a falta de siete minutos: 76-76.
Aunque el ritmo tuvo un amago de declive, fue en este momento en el que el FC Barcelona, liderado por Claver, trató de romper el partido. El nuevo alero culé penetraba, anotaba de tres, daba buenos pases… Esto, y algunas acciones puntuales de Oleson, Peno y Vezenkov, otorgaron una ventaja de 6 puntos: 84-78. Pese a ello, enfrente se encontraba Kanter, quien contrarrestaba con buenos movimientos (el turco, a la postre, terminaría con 24 puntos y 8 rebotes). Abrines, quien no había tenido minutos desde el primer cuarto, pudo demostrar su valía, anotando dos canastas de mucho valor (entre ellas, un 2+1 ante Tomic, a quien pareció que le pesaban las piernas en la segunda parte).
Así, se llegaba con un resultado muy ajustado a los últimos minutos: 86-86 a falta de dos minutos. Un triplazo de Claver a pase de Peno y dos acciones de Kanter dejaban las cosas 89-90. El pabellón tenía su mejor ambiente, y con 20 segundos, Vezenkov erró el triple que podría haberles puesto dos arriba. Aunque finalmente se dio otra oportunidad, tras dos tiros de Kanter y con dos segundos, el ala-pívot búlgaro volvió a fallar y el resultado se quedó en un 89-92.
El Barcelona, con un Claver estelar, autor de 25 puntos (9/12 en tiros de campo), 4 rebotes, 2 asistencias y 2 robos; no fue capaz de llevarse el gato al agua, a pesar de su inmejorable circulación de la primera parte y ciertos momentos del último cuarto. La calidad de gente como Kanter y Westbrook deja claro que no es una gesta fácil. No obstante, las sensaciones del nuevo Barça Lassa son magníficas, y esto teniendo en cuenta que faltaban piezas de su puzle.