Arranca una nueva temporada en la ciudad del motor, pese a que los aires que la rodean no sean los más optimistas. Caras nuevas, predilección por el juego interior, apuestas por jóvenes talentos, tanto en el backcourt como en el frontcourt, y dos piezas veteranas que guiarán el rumbo del futuro de los Detroit Pistons. Tras una amarga temporada, donde ganaron 20 partidos y perdieron 46 antes del parón por Covid, dejando sensaciones de insuficiencia, muy limitados con las armas que poseen. Sus dos estrellas se han visto lastradas por problemas físicos, y el ritmo de juego de los de Dwane Casey fue muy lento, sin apenas ideas para progresar en una conferencia Este que no fue muy competitiva, por lo que el problema es mayor desde dicho punto de vista. Con Killian Hayes como número 7 del Draft, presencia en el juego interior y la polivalencia de Jerami Grant en la agencia libre, los Pistons buscarán acortar los plazos hacia una presente y futura reconstrucción.
NOVEDADES
Las principales novedades llegan desde la agencia libre. A priori, su principal apuesta de cara a los años venideros girará alrededor Killian Hayes e Isaiah Stewart. Números 7 y 16 del draft respectivamente, serán de la partida de Casey desde el minuto uno, especialmente el francés.
Hayes llega del ASVEL francés, donde se caracterizó por su visión de juego, capacidad de organización y equilibrio defensivo. Tanto Casey como Rose alabaron la llegada de Hayes a Detroit. Desde el primer día impactó su lectura del juego, incluso el entrenador se atrevió a decir que ve cosas de Jason Kidd en él, y trataran de pulirlo, consolidándose como base titular, custodiado por el propio Derrick Rose, quien tratará de realizar la labor de mentor para el rookie, delegándose a la rotación de segunda unidad.
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Una de las caras más codiciadas de la agencia libre decidió firmar también por los Pistons: Jerami Grant. El ex de los Denver Nuggets firmó 60 millones en tres temporadas. Su rendimiento la pasada temporada sirvió al alero para ganarse un contrato de tal calibre. Jugador polivalente en ambos lados de la cancha, capacidad anotadora y versatilidad para atacar el aro. Su punto a mejorar se encuentra en el tiro de larga distancia, que en un equipo con organizadores de gran velocidad y presencia interior, abrirá la cancha y permitirá jugar off ball precisamente a jugadores de su perfil. Tendrá la notoriedad en la rotación que esperaba, por lo que debe mostrar su valía en una franquicia en reconstrucción.
Tras la salida de Christian Wood rumbo a Houston, los Pistons se centraron especialmente en la agencia libre a rodear a Blake Griffin. Las adquisiciones de Mason Plumlee y Jahlil Okafor, además de Isaiah Stewart vía draft, completarán al Cyborg y a Sekou Doumbouya. Combinación de juventud y experiencia, jugadores sólidos en defensa y versátiles en el juego de pies sobre la zona, bien complementados.
Finalmente, en el backcourt llegan en busca de oportunidades Delon Wright, quien parte como favorito para acompañar en la línea exterior inicial a Hayes, junto a Wayne Ellington, quien vuelve a la que fue su casa como veterano 3&D necesario en los esquemas de Casey.
Estrella y segunda espada
Teniendo un Cyborg en la plantilla... difícil se nos hace elegir a otra estrella. Pese a los rumores de traspaso que remolonearon a su alrededor, finalmente parece que Blake Griffin continuará vistiendo la elástica de la Motor City. Sus constantes problemas con las lesiones impiden volver a ver la versión dominante del que fue número uno del Draft. Es más, me atrevería a decir que más completa. Su explosividad que marcó en sus primeros pasos en la liga se vieron lastrados por sus problemas físicos. No obstante, en su regreso a las canchas pudimos disfrutar de un Blake Griffin con una notable capacidad de tiro en media y larga distancia, excelente juego de pies, y pinceladas de explosividad que nos siguen levantando del asiento. Ojalá le respeten las lesiones, ya que confiamos en ver una temporada más dicha versión 2.0 del Cyborg.
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Secundado estará desde la segunda unidad por Derrick Rose. Otro número uno del draft a quien más han destrozado las lesiones. En Minnesota nos deslumbró un rayo de luz de lo que llegó a ser en Chicago, y consolida la idea en Detroit. Tras la salida de Reggie Jackson durante la pasada temporada a los Clippers, Rose se alzó con la tutela de base titular, anotando 18.1 puntos y repartiendo 5.6 asistencias. Su 21 de PER refleja la eficiencia del jugador sobre el ataque de los Pistons, además de un 2.5 en Win Shares, crucial para lo poco vistoso que disfrutamos en Detroit. Comenzará la temporada delegando el puesto sobre el rookie Killian Hayes, pero será la principal referencia de la segunda unidad, descompensada en el banquillo de Dwane Casey.
Estilo de juego
Los Pistons fueron el tercer peor equipo en pace, es decir, ritmo de juego, de toda la liga. Únicamente Denver Nuggets y Charlotte Hornets están por detrás de ellos. Hayes, Rose y Delon Wright tratarán de dar un impulso sobre dicha carencia, donde tiradores de la talla de Svi Mykhailiuk, Wayne Ellington o Josh Jackson deben aprovechar dada la creación de espacios liberados, donde especialmente el ex de los Grizzlies, quien tiene mayor físico y capacidad de atacar el aro, aparecerán.
Los de Dwane Casey jugarán de manera más estructurada, sin olvidar meter una marcha más. El pick & roll y pick & pop deben estar a la orden del día. La capacidad de tiro de media y larga distancia de Griffin se verá mejorada con la asociación de Hayes, y el físico de Plumlee, Okafor, Doumbouya o Stewart darán un salto de calidad en el juego de pies de cara a canasta.
En referencia a los jugadores interiores y su capacidad física, el juego de espaldas a canasta será crucial. Situaciones de dos contra dos abrirá la pista en el lado débil, y con un juego de pies notable creas situaciones de espacios interiores y, en caso de saltar ayudas, tiros exteriores liberados.
Objetivos y previsión
Si bien los Detroit Pistons no lo tienen muy complicado para mejorar su imagen con respecto a la pasada temporada, su objetivo debe ser pasar un año de transición para encajar las piezas. Que sus apuestas del Draft tengan una buena armonía donde crecer e implementar su estilo de juego, que den lugar al optimismo. Quizás tengan sobrepoblación en el juego interior, pero son bazas para que los exteriores tengan más oportunidades y minutos de peso en la rotación.
Si la segunda unidad responde como es debido, los Pistons deberían dar pelea en el Este para estar rondando la octava plaza de Playoffs y, en el mejor de los casos, poder incluso asaltarla.