Para su primer partido con los Suns, Jalen Green brilló ante los Clippers. Mientras que Bradley Beal pasaba completamente desapercibido en su partido, el ex Rocket entusiasmó a los aficionados de Phoenix. Afectado por los isquiotibiales, Jalen Green se perdió los primeros ocho partidos de los Suns y fue ante los Clippers que pudo, por fin, vestir la camiseta de Phoenix tras su traspaso por Kevin Durant.

Un debut soñado en Arizona

Casualidad del calendario y de las lesiones, fue ante Bradley Beal, a quien reemplaza en el puesto en Arizona Y este encuentro no dará ningún arrepentimiento a los aficionados de Phoenix. Porque mientras que su ex jugador sufría enormemente, finalizando con 5 puntos con 2/14 en tiros, Jalen Green mostró todo lo que puede aportar.

En 23 minutos, terminó con 29 puntos con 10/20 incluyendo 6/13 en triples y un +30 en el +/- que testimonia el impacto que tuvo durante sus pasajes. Es el mismo Jalen Green de siempre, ansioso y que no siempre toma los mejores tiros, pero su capacidad para romper la primera línea de defensa le hará bien a este equipo de los Suns.

Su entusiasmo daba gusto verlo, especialmente porque llevó en volandas a sus compañeros y al Mortgage Matchup Center. “Físicamente, me sentía realmente bien. En general, estaba muy impaciente por entrar a la cancha. Les decía a los chicos que ni siquiera podía dormir. Normalmente, hago una siesta antes del partido. Esta vez, ni siquiera podía hacer mi siesta. Estaba tan impaciente”, explicó después de la victoria.

Este artículo es una adaptación de un artículo publicado por nuestro socio Basket USA.