Jornada vibrante para el baloncesto. En Italia, Mens Sana Siena y Pallacanestro Cantù optaban por dedicarle una oda al baloncesto y jugar un partido trepidante en el que Gianluca Basile, sempre Baso, Bo McCalebb, Ksistof Lavrinovic y Doron Perkins,entre otros, elevaban el baloncesto hasta su máxima expresión. El partido, aplazado, acabó en prórroga y ambos equipos superaron los 90 puntos (95-90).

Todavía con el regusto dejó el partido de Lega, la NBA nos presentaba un encuentro que bien podría corresponder a las series finales si ambos equipos jugaran en distintas conferencias. Chicago Bulls y Miami Heat centraban la atención mediática en el gran circo y no defraudaron. Los Bulls de Thibodeau iusieron ese bienestar en alza que respiran los equipos que pueden hacer grandes cosas en playoffs. Lo ejecutaron  contra Miami Heat, el gran coco, el favorito para el anillo que no lo es tanto después del viraje que ha dado su juego en los últimos partidos. Los de Illinois hicieron un buen uso de su amplio roster y fue C.J. Watson quien decidió alargar la tensión con un triple que forzaba la prórroga. En el tiempo extra sólo existieron 2 tiros libres convertidos por los Heat. A esto se redujo la supuesta supremacía de unos Heat que empiezan a ahogarse en la ansiedad. Taj Gibson y C.J. Watson -seguimos hablando de secundarios- resultaron decisivos en los cinco minutos añadidos (86-96). En el global de la producción, LeBron James volvió a ser el rey de la estadística con 30 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias, aunque más productivos fueron los 16 puntos, 9 asistenicas, 3 rebotes y 3 recuperaciones de Watson, el mejor hombre de los Bulls, al que se le dan bien los Heat. Derrick Rose, 2 puntos, todavía está en proceso de recuperación de sensaciones. Se le espera, nuevamente, para playoffs.

La victoria consolida a los Bulls como el mejor equipo de la liga, metiéndolos de nuevo en una dinámica ganadora después de la derrota en la prórroga contra Knicks o las dos consecutivas ante Rockets y Thunder. Mientras, Miami ha pillado un poco de frío en este mes de abril y ya arrastra cuatro derrotas en los últimos 7 partidos, dos de ellas consecutivas ante posibles rivales en el Este (Boston y Chicago). Precisamente resta jugar un partido más contra ambos equipos, con los que lleva un balance negativo (1-2).

Es pronto para atinar si se trata de un simple resfriado o si está entrando en un proceso gripal más serio. Veremos si Spoelstra dispone de algún medicamento y estaremos atentos a ver cómo reacciona.