Pocos jugadores de la NBA pueden decir que cambiaron tanto como Lauri Markkanen. No solo se vio otra cara de su juego, sino que pasó de ser considerado un jugador discreto, con interesantes habilidades y moderado crecimiento a ser un All Star y líder en una franquicia. El del finlandés es un caso de reinvención de los más interesantes que se vieron en el último tiempo.

Ese cambio de narrativa le valió el premio al Jugador Más Mejorado, no solo porque pasó de promediar 14.8 puntos en Cleveland Cavaliers a firmar 25.6 por noche con Utah Jazz, sino porque borró las páginas anteriores de su carrera, que lo posicionaban como un interno frío, con muchas carencias, algún que otro partido bueno y sin sobresalir del grueso umbral de mediocridad en el que se encuentran quienes no pueden alcanzar el liderazgo.

La histórica clasificación de Finlandia al Mundial de baloncesto con él a la cabeza y la llegada a Salt Lake City como cara conocida de un equipo en formación puedan ser algunas razones que expliquen el mejor año de su carrera. Llegó al Jazz sin demasiado ruido, para disputar una temporada sin demasiadas expectativas.

Sin embargo, la historia fue distinta: generó química con sus compañeros, comenzaron a ganar y el espíritu competitivo los hizo pelear hasta el final por un lugar en la postemporada. El Jazz consiguió el jugador que le faltaba: un interno versátil, con un tiro exterior sólido (39%), inteligencia en la toma de decisiones, fundamentos defensivos y sobre todo decisión para penetrar hacia el aro. Finalmente, Markkanen pudo demostrar sus conocimientos aprendidos en la escuela europea y contribuir con su máximo potencial.

Como en ocasiones sucede gracias a un giro favorable del destino, el finlandés encontró su lugar en el mundo de la NBA. Fue en su sexta temporada en la liga, pero justo a tiempo para poder cambiar su imagen insípida, inestable y delicada, por la de un jugador sólido, con liderazgo, carácter y mentalidad ganadora.

LOS NÚMEROS DE ESTRELLA QUE TUVO MARKKANEN

Esa agresividad que mostró por primera vez en la liga lo destacó como un ala-pivot dominante en la pintura, y no como un lanzador perimetral como lo había mostrado en sus equipos anteriores. Desde 2013 hasta la fecha, solo tres hombres grandes (2,13 m o más) promediaron 25 puntos: Joel Embiid, Giannis Antetokoumpo y Lauri Markkanen.

Para él, la 2022-2023 fue una campaña histórica, en la que tuvo 16 partidos de 30 puntos. Además, se convirtió en el primer finlandés en ser seleccionado para el All-Star. Lauri Markkanen, que ahora se encuentra haciendo el servicio militar obligatorio en su país, nunca olvidará esta temporada. Estuvo cerca de llevar a los playoffs a una franquicia que ya había tirado la toalla y le demostró a todo el mundo que siempre tenemos la posibilidad de cambiar nuestro destino.