La polémica generada por la publicación de una película antisemita por Kyrie Irving causó un eco tan grande que hasta LeBron James, estrella de Los Ángeles Lakers, se metió en el caótico incidente y expresó que dijo que su excompañero en Cleveland Cavaliers “pidió perdón y debería poder jugar”, al referirse a la suspensión del base de Brooklyn Nets.

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“Ya se los dije. No estoy a favor de la difusión de mensajes ofensivos. Y seguiré de esta manera, pero creo que Kyrie pidió perdón y debería poder jugar. Esto es lo que pienso. Así de simple”, escribió LeBron James en su cuenta de Twitter.

“Ayúdenle para que aprenda la lección, pero debería estar jugando. Lo que se le está pidiendo para regresar a la pista es excesivo, en mi opinión. La imagen que se le está dando no refleja lo que es”, explicó.

Tras conocer la sanción de los Nets, Irving pidió disculpas por su mensaje, aunque sigue apartado de su equipo sin poder jugar partidos de la temporada. Además, Nike anunció la semana pasada que suspendió su relación de patrocinio con Irving, que comenzó en 2011, al destacar que en la compañía no hay “sitio para discurso de odio”.

El ‘tuit’ publicado por LeBron se cerró con un “ya regreso a mi rehabilitación”, después de que ‘King James’ acabara el derbi angelino de este miércoles con molestias en una ingle.

LeBron, que cumplirá 38 años en diciembre, fue el mejor jugador de los Lakers (30 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias) en el clásico que su equipo perdió contra los Clippers, pero se marchó al vestuario con 5.41 el último cuarto por esa lesión.