Ni LeBron, ni Wade, ni Bosh. Los héroes de Miami fueron los menos habituales. Allen, Miller, Andersen, y sobretodo Mario Chalmers  se encargaron de despertar al actual campeón de la NBA con un gran final de tercer cuarto para romper el encuentro e igualar las series. “Super Mario” anotó siete puntos en este periodo  y rubricó un muy buen partido liderando a todos los anotadores con 19 tantos. Los de Florida aprovecharon la aciaga segunda mitad de los Spurs para ganar un enfrentamiento que se les estaba complicando mucho.

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Cambio de guión respecto al jueves pasado ya en el inicio del encuentro y mal augurio para los Spurs, que perdieron más balones (5) en el primer cuarto, que en todo el partido anterior entero (4). “Todo lo que vi fueron pérdidas de balón” dijo Popovich antes del segundo periodo. Pese a ello, los tejanos demostraron porque han llegado hasta aquí manteniéndose siempre cerca de los Heat gracias a una muy buena transición defensiva que impidió puntos al contraataque y a la inspiración en el triple de Danny Green (4/4) y Gary Neal (2/2). Esto y la defensa sobre las estrellas de Miami. El Big Three de Florida sólo consiguió 20 de los 50 puntos de los locales en la primera parte, un hecho nada habitual en los campeones, preocupados al descanso por el poco efecto en el juego de LeBron hasta el momento (2/7 en tirosy 4 asistencias) y por ver a San Antonio tan cerca en el marcador (50-45).

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La vuelta de los vestuarios no deparó muchos cambios en el encuentro. Los Spurs seguían enganchados a los Heat en el marcador pese a no estar cuajando un buen juego en ataque, pero eran capaces de cerrar su canasta y cortar cualquier fluidez en la ofensiva de Miami. Estaban secando a LeBron (2/12 hasta el final del tercer cuarto) y los de Florida ya temían otro partido igualado hasta el último suspiro. Pero entonces aparecieron los que nadie esperaba. Los triples de Miller (9 puntos) y Allen (13) y la mejor versión de Mario Chalmers catapultaron a los hombres de Spoelstra, que le endosaron un parcial de 21 a 3 entre el final del periodo y el inicio del cuarto para matar el partido.

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A partir de ahí, LeBron despertó con los tejanos ya rendidos y cerró la noche con buenos números (17 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias) pero consciente que en los momentos calientes no había encontrado respuesta a la defensa de Kahwi Leonard. Los Spurs bajaron los brazos ante el vendaval heat y los minutos finales sirvieron para dar descanso a las estrellas de ambos conjuntos y para que jugadores como Anthony, Jones o McGrady pudieran disputar en estas series. Con el 103 a 94 definitivo, las Finales llegan empatadas a San Antonio con ambos equipos con muchos interrogantes por resolver y sin ningún favorito claro para el tercer encuentro.