La historia la escriben los pioneros, y esta noche, Milwaukee Bucks ha ejercido el rol más valiente posible, el de líder que toma la decisión más difícil — pero correcta. Los favoritos al anillo han decidido no jugar el quinto partido de la primera ronda de los playoffs ante Orlando Magic en un boycott ante el suceso ocurrido hace escasoos dos días en Wisconsin, donde Jacob Blake fue disparado siete veces por la espalda. Milwaukee es el único equipo que por ahora ha actuado activamente, pero desde el día de ayer, Toronto Raptors y Boston Celtics han tenido reuniones sobre la opoción de no jugar las semifinales del Este. Y ahora, la decisión de Milwaukee puede representar la primera ficha del dominó. 

Las alarmas saltaron a siete minutos del inicio del partido. Mientras Orlando Magic calentaba preparando el quinto encuentro, los Milwaukee Bucks todavía no habían pisado la pista, algo sorprendente. A tres minutos del inicio de partido, Orlando dejó la pista hacia vestuarios donde los Bucks seguían encerrados, con ejecutivos de la NBA, incluyendo el VP Kiki Vandeweghe. Según explican Adrian Wojnarowski y Shams Charania, las puertas del vestuario nunca se llegaron a abrir y el partido quedó cancelado, a la espera de la decisión de la NBA sobre la situación. 

Desde hace días, jugadores y entrenadores han mostrado cómo desde la burbuja sentían que su labor no estaba siendo suficiente,  su descontento sobre como el mensaje era envíado pero no escuchado. La narrativa era el baloncesto y no las declaraciones, los 50 puntos de Donovan Mitchell opacaban sus protestas constantes, igual que antes fueron LeBron James, Paul George, Jaylen Brown, Chris Paul, Doc Rivers y la lista roza a cada miembro NBA que está en la burbuja. 

Ahora quedamos a la espera de qué va a pasar en el futuro. Esta misma noche, LeBron James y los Lakers se enfrentan a Portland, dos equipos muy activos socialmente, y mañana, Celtics y Raptors deberían abrir una serie que igual nunca empieza. Además, la NBA tiene que decidir si sancionar a Milwaukee por no presentarse al partido o si, ante la posibilidad de que los jugadores decidan boicotear cada partido, suspender la competición. 

Seguiremos informando.