Carlos Boozer podría no continuar en Utah la temporada que viene. El ex de Duke indicó a en una conversación "informal" que quiere desestimar la player option de 12.657.233 $ para la temporada 2008-2009 y convertirse así en agente libre sin restricciones. Boozer, evidentemente, está pensando en una mejora económica considerable. “Es una buena decisión de negocio tanto para mí como para mi familia”, indicó el fornido jugador. Carlos ya dio pistas sobre sus planes futuros tras el encuentro ante los Celtics, aunque en ese momento decidió “morderse la lengua”. Tras la victoria en East Ruterford, en la que era su ausencia número 15, apostó por hacer pública una decisión que es más que definitiva.
Este paso adelante de Boozer coincide con la explosión de juego que está experimentando Paul Millsap. En este sentido los Jazz están de enhorabuena por este torrente desbordado, que ha superado todas las expectativas creadas desde que Boozer se lesionara en el cuádriceps. El alero titular estaba promediando 20 puntos y 11.7 rebotes hasta que esta lesión le apeó tras el partido número 12, disputado ante los Bucks. El balance del equipo: 8 victorias y 4 derrotas. No era mala cifra teniendo en cuenta que el director de la orquesta, Deron Williams, no había podido coincidir con el power forward.
La irrupción de Millsap como titular no se produjo hasta el segundo partido después de la lesión de Boozer. Tras el intento fallido ante Spurs de poner en el quinteto titular al altísimo Koufos, Millsap inició su aventura como titular ante los Grizzlies. No realizó un gran encuentro (8+4) pero su equipo vuelvió a ganar. Deron todavía no había regresado. A partir de la victoria en Beale Street, Millsap empezó a encadenar grandes actuaciones que le han llevado a superar el 20+10 en seis ocasiones, consagrándose con los 32 puntos, 10 rebotes y 2 tapones en la derrota ante los Celtics. Desde los 4 rebotes capturados contra Grizzlies, Millsap no ha bajado del doble doble por noche, extendiendo su racha a 13 partidos. El balance de victorias derrotas de los Jazz es de 8-7 en los 15 partidos sin CB, cifra que no está nada mal si se descuenta la aportación del lesionado jugador.
Este avance dado por Buzzer abre un abanico de posibilidades de cara a las negociaciones de su contrato y el de Millsap. Eso sí, Larry Miller, no quiere pagar impuesto de lujo la temporada que viene. El elevado contrato de Kirilenko –craso error- más los emulumentos de Boozer pueden dificultar hacer un contrato "elevado" a Millsap, que será agente libre con restricciones al término de la presente edición. El actual y primer contrato profesional de Millsap, no se corresponde con el nivel de juego alcanzado en las dos últimas temporadas. Además, la mejora experimentada por el jugador va a exigir un acuerdo que posiblemente ronde los 10 millones de dólares y los Jazz necesitan hacer hueco salarial. El GM Kevin O’Connor tendrá que hacer operaciones de ingeniería económico si se apuesta claramente por Boozer y Millsap. En esta línea, los 9 millones de dólares del turco Okur podrían jugar un papel decisivo.
De momento, este desliz de Boozer ha provado el enfado del propietario, Larry Miller, quien se ha despachado a gusto en la radio diciendo que es una de las mayores estupideces que ha escuchado a un jugador en 20 años. Algunos equipos NBA ya se frotan las manos con la posibilidad de que Carlos Boozer esté en el mercado.