36 minutos de pánico y 17 de intriga necesitaron los Heat para poder doblegar a los Spurs anoche en Miami, con el sexto partido de las finales en marcha, el primer match-ball salvado por los favoritos, que se vieron contra las cuerdas. Tras el 27-25 del primer cuarto, los Spurs iniciaron una especie de velocidad de crucero que parecía llevarles a ser los campeones este año. Duncan anotaba como quería (12 puntos en el primer cuarto), Parker acumulaba 4 asistencias y Leonard les seguía con 8 puntos más. Por los locales, el máximo anotador era Chalmers con 10 puntos. Mala señal para los Heat.

En el segundo, el drama fue a más para los aficionados locales, que vieron como sus Heat solo eran capaces de anotar 4 puntos en los últimos 7 minutos de la primera parte (los 4 de LeBron), mientras que Duncan terminaba con 25 puntos y 8 rebotes, siendo total dominador del primer tiempo. Con Wade (6 puntos) y Parker (4 puntos) en un segundo plano, seguían siendo los secundarios Leonard (10) y Chalmers (14) los que planteaban batallas alternativas sobre el parqué.

El tercer cuarto todavía puso más miedo en el cuerpo de los Heat. Empezando por un triple de Ginobili, el despertar de Parker (9 puntos en el cuarto) y el recital de Duncan (30 puntos), que sin embargo terminó demasiado pronto. Se sumaba al desacierto de James, que tras los tres primeros períodos terminó con 3 de 12 en tiros de campo. Algo tenía que cambiar para Miami, que perdían 58-71 a falta de 3:50. Y todo empezó con uno de los tres triples que anotó Shane Battier, ese jugador que parece que nunca está. Entre fallos, Wade y James consiguieron arreglar un poco el electrónico hasta dejarlo 75-65 al final de los primeros 36 minutos. Aún quedaba mucho por hacer.

Y si el tercero empezó con un triple de Ginobili, esta vez fue Chalmers quien abrió el cuarto desde la distancia. A una canasta de James, le siguió un triple de Miller y luego dos mates de Lebrón, que ya se había entonado y puso el 80-77 con todavía nueve minutos por jugar. En la jugada siguiente, una canasta de Leonard precedió a tres minutos y medio de sequía en los Spurs. Cuando el mismo Leonard volvió a anotar, los Spurs se pusieron uno abajo y James ya llevaba 25 puntos. Un arreón de Tony Parker volvió a poner a los suyos por delante cuando encaraban el último minuto, pero un triple de James tras fallar Ginobili un tiro libre y otro de Ray Allen a 5 segundos del final, tras fallar Leonard de nuevo desde la personal, llevaron el partido a la prórroga. Como dijo LeBrón al terminar: "Si ibamos a perder, lo iba a hacer dejándo toda la energía que tuviera en el parqué".

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Al inicio de la prórroga, 4 puntos de Kahwi Leonard (22 en total) traían más sufrimiento a las gradas del American Airlines Arena. Pero tras ellos, San Antonio solo anotó un tiro libre por medio de Tony Parker (19 puntos, 8 asistencias), que dejó a los Spurs 3 arriba. Pero cuando un equipo no anota en los últimos 2:42 de una prórroga, tiene las de perder. Los Spurs no llegaron a lanzar en el último minuto: dos balones perdidos por Ginobili (8 en total) y dos lanzamientos taponados por Chris Bosh. James con 2 puntos y Allen con 4 se encargaron de dejar el 103-100 final. El jueves, en el mismo escenario, todo o nada. Mismos protagonistas. Hagan sus apuestas.