La temporada de Philadelphia 76ers ha sido un completo desastre. Tras un inicio sorprendente, pronto llegó una sucesión de derrotas que puso a la franquicia donde los analistas la situaban, en lo más bajo de la clasificación de la Conferencia Este. La salida casi sin contrapestraciones de Spencer Hawes y Evan Turner acentuaron su línea descendente y una clara voluntad desde los despachos de "tankear", en busca de una elección alta en el próximo draft. Los Sixers acabaron la temporada con un nefasto balance de 19-63. Esta situación ha supuesto una oportunidad que ha sido perfectamente aprovechado por Michael Carter-Williams (1.98/22 años), número 11 del pasado draft que ha contado con minutos y responsabilidad sin presión en la franquicia de Pensilvania.
El base formado en Syracuse ha disputado una media de 34.5 minutos en los 70 partidos que ha disputado, firmando 16.7 puntos, 6.3 rebotes y 6.2 asistencias, incliuyendo dos triples dobles. Sus números le han servido para ser elegido Rookie del Año, superando al otro contendiente por este título, Victor Oladipo (1.93/21 años). El jugador de los Magic se fue a los 13.1 puntos, 4.8 rebotes y 4.8 asistencias de media.
youtube://v/3M3BP2QvvuM