Nowitzki (40) mantiene a los Mavs en Play-Offs; Toronto acecha a los Cavs

El mejor partido de la noche se jugó en el American Airlines Centre. Los Dallas Mavericks y los Portland Trail Blazers llegaban con un record casi exacto y se enfrentaban a un rival directísimo en la lucha por entrar a los Play Offs de la Conferencia Oeste. Fue tal la intensidad del encuentro que hizo falta la disputa de una prórroga para decantar el resultado, que acabó favoreciendo a los locales (132-120). El encuentro estuvo marcado por un gran número de alternancias en el marcador, y cuando parecía que los Mavericks habían dictado sentencia, apareció Damian Lillard (26 puntos y 8 asistencias, pero con un pobre 8 de 26 en tiros de campo) para mandar el encuentro al tiempo extra con una bandeja por elevación. En ella, destacaron los dos nombres propios de los texanos: Dirk Nowitzki dio toda una clase de tiro y acabó con 40 puntos, que le colocan junto a Michael Jordan, Abdul-Jabbar y Malone como los únicos jugadores que han llegado a esa cifra con más de 37 años. Por otro lado, Deron Williams dejó una melancólica versión del gran jugador que lleva dentro, y firmó 31 puntos y 16 asistencias repartidas. Demasiado para unos Blazers que, más allá de Lillard, tuvieron en Crabbe (24) y Plumplee (14 y 19 rebotes) a sus jugadores más destacados. 

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Toronto Raptors sigue firme en su ascenso hacia la cumbre de la Conferencia Este, y ya está a tan solo un partido y medio de los Cleveland Cavaliers. Anoche, derrotaron con sufrimiento a Orlando Magic (105-100) con una rotación de tan solo ocho jugadores. La pareja Scola-Biyombo fue la gran sensación del encuentro. Los ex de la Liga Endesa dieron un recital bajo los tableros, acabando con 20 puntos y 8 asistencias el argentino y 12 puntos, 11 rebotes y 6 tapones para Biyombo, que ha firmado su mejor semana desde que juega en la NBA. Los 25 puntos de DeRozan fueron la puntilla para unos Magic que no supieron aprovecharse de la inferioridad numérica de su rival. Evan Fournier y Victor Oladipo, con 21 puntos cada uno, lideraron a los suyos hasta el último cuarto, pero la falta de alternativas les impidieron llevarse la victoria.

Victoria sencila de Boston Celtics ante los Sixers (105-120). Las aspiraciones de ambos equipos en este punto de la temporada están en polos prácticamente opuestos y ello se dejó ver en la intensidad de uno y otro bando. Los Celtics no quisieron sufrir más de lo necesario, y con una ventaja de +12 al final del primer cuarto, manejaron el resto del encuentro a su antojo. Isaiah Thomas llevó una vez más el timón de los verdes, con 26 puntos, 6 rebotes y 8 asistencias mientras que el resto del quinteto titular estuvo por encima de los 17 puntos, siendo muy superiores a sus rivales en el aspecto ofensivo. Por parte de los de Philadelphia, que encadenan su quinta derrota de manera consecutiva, destacaron los 26 puntos y 8 rebotes de Carl Landry y los 18 tantos anotados por Hollis Thompson.

Segunda derrota en dos días de Los Ángeles Clippers ante unos Pelicans mermados por la noticia de la baja para lo que resta de temporada de Anthony Davis. Con las ya conocidas ausencias de Ryan Anderson y Norris Cole, el encuentro se antojaba bastante sencillo para unos Clippers que se han venido abajo en el último mes, con derrotas ante rivales bastante inferiores a ellos. La pareja de bases Holiday-Douglas se combinó para, con 37 puntos y 17 asistencias, dejar en nada el buen partido de su emparejamiento, Chris Paul (24+13 él solito). Una vez más, los angelinos se dejaron llevar, dando la sensación de que en cualquier momento darían un arreón que nunca llegó, aunque tuvieron un triple de Austin Rivers (que no anotó ninguno de os cinco que intentó) para forzar la prórroga al final del encuentro.. Incluso un nada habitual como Tim Frazier se permitió anotar 17 puntos ante la frágil defensa que mostró su rival. Los 24 puntos con 4 triples de Redick también fueron inútiles, y los Clippers suman su sexta derrota en los últimos diez partidos (109-105).

Después del partido de los Mavs, Utah se conjuraba ante un encuentro en el que la victoria era más necesaria que nunca si no querían despegarse de ellos en la clasificación. Y bien que demostraron que quieren estar en postemporada, con un partido muy serio desde la defensa para derrotar a domicilio a Milwaukee Bucks (85-94). Con una apaullante diferencia en rebotes (44 a 27), los Jazz se aprovecharon de las constantes segundas oportunidades que ofrecía su rival para llevar el tempo del encuentro. El parcial de 31-18 del tercer cuarto les permitió incluso afrontar los últimos 12 minutos con cierta calma. Gordon Hayward fue el lider ofensivo con 18 puntos, y Rudy Gobert hizo un roto en la zona con 12 puntos y 14 rebotes (6 de ellos ofensivos). Por parte de los Bucks, una vez más los mejores fueron Antetokounmpo (12 puntos, 4 rebotes y 7 asistencias) y Jabari Parker (19 puntos, 8 rebotes y 2 asistencias). 

Sacramento obtuvo una victoria más sencilla de lo que refleja el marcador (88-80) en un duelo más que interesante entre DeMarcus Cousins y Robin López. Con los Play Offs casi fuera del alcance de ambos equipos, el partido fue un show en el que los pivots fueron los grandes protagonitas. Si bien los 24 puntos y 20 rebotes de Cousins son una barbaridad, es más lógico esperar eso de él que los 23 y 20 con los que acabó López, que en ningún momento se arrugó ante uno de los mejores (si no el mejor) interores de toda la liga. El encuentro estuvo marcado por la ausencia de Carmelo Anthony debido a una migraña, y su equipo notó mucho su ausencia en el apartado ofensivo. Ya desde el incio, los de Nueva York se vieron con una desventaja de 16 puntos con la que tuvieron que convivir durante gran parte del encuentro debido al acierto de Rudy Gay, que anotó 17 puntos. Por parte de los Knicks, se esperaba más aportación de Porzingis como referente en ataque, pero se quedó en 13 puntos. José Calderón tampoco estuvo acertado, y en 32 minutos tan solo anotó un triple y repartió 4 asistencias. 

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EL MVP: DIRK NOWITZKI (MAVERICKS)

El astro alemán lo está dando todo por llevar a su equipo, una vez más, a disputar las eliminatorias por el título. Con 37 años y un físico mucho más liviano, cada actuación es digna de reconocimiento y agradecimiento por su garra y su clase en cada uno de sus movimientos. Inimitable.