• San Antonio Spurs – Utah Jazz 114 -83 (2-0)

Comoda victoria de los Spurs que no necesitaron emplear a fondo a sus máximas figuras para quedarse con el triunfo ante un errático conjunto de Utah Jazz. Tony Parker (18 puntos y 9 asistencias) volvió a estar indetenible para sus defensores y contó con la buena compañia del novato Kawhi Leonard (17 puntos) y Danny Green (13), quienes estuvieron muy acertados desde los 6,75 con 6 conversiones en 9 intentos. En Utah apenas Josh Howard y Al Jeferson consiguieron anotar en doble dígito con 10 puntos cada uno.

Desde el inicio los Spurs marcaron diferencias con una defensa sólida que favoreció el juego de contragolpe. En este aspecto se destacó Leonard, quien aprovechó muy bien los robos de balón y los rebotes defensivos para anotar canastas rápidas en transición. En ofensiva estacionada Parker rompía la primera línea con facilidad y abría el balón para los tiradores abiertos que se mostraron muy efectivos en todo el juego (10 de 22). Los de Popovich tomaron rápida ventaja de 15-4 en los primeros 5 minutos de partido.

Tras un mejor inicio del Jazz, liderado por Paul Millsap (9 puntos y 5 rebotes) y Derrick Favors (9 y 9), el recientemente proclamado Entrenador del Año, solicitó un tiempo muerto y su equipo reaccionó de inmediato. Un parcial de 22 a 2 (con Utah sin anotar durante 7 minutos) inclinó definitivamente la balanza a favor de los tejanos que tuvieron en Green a su mejor hombre con 11 puntos en ese lapso.

Si los de Salt Lake City albergaban alguna esperanza de colocarse en partido, esta se esfumó en el inicio del tercer período. La pareja formada por Parker y Tim Duncan (12 puntos y 13 rebotes) apareció en todo su esplendor y la diferencia en el tanteador superó los 30 puntos. El último parcial estuvo de mas y sirvió para ver en acción a lo profundo de ambos banquillos, destancandose Patrick Mills con 11 puntos.

  • Indiana Pacers – Orlando Magic 97-74 (2-1)

Victoria de solidez y solvencia de unos regulares Indiana Pacers por 97-74 en la pista de una Orlando muy intermitente y que únicamente tuvo en Glen Davis (22 puntos) su principal arma. Los de Vogel fueron mejores durante todo el encuentro, demostrando un gran juego de equipo, con Danny Granger (26 puntos y 9 rebotes) y Roy Hibbert (18 tantos y 10 rechaces) a un gran nivel.

Los Pacers salieron dispuestos desde el inicio a llevarse el partido, muy metidos psicológicamente y demostrando la fluidez necesaria en ataque que habían ya mostrado en el segundo partido de la serie. Rápidamente, con Granger y Hill como ejecutores, los de Indiana tomaron 9 puntos de ventaja (23-14) aunque no eran conscientes del huracán que les iba a superar en el segundo cuarto. Llámenle como quieran, "Big Baby" o el mote que ustedes más deseen. Pero el segundo periodo de Glen Davis fue de auténtico "Superman". El "cinco" de los Magic decidió tomar la iniciativa en su equipo y fue encadenando suspensión tras suspensión desde un rango no más lejano a los cinco metros. Indiana seguía haciendo su juego, pero Davis, incluso con 2+1 espectaculares más propios de escoltas atléticos como Dwyane Wade que de un interior pesado como él, respondía una y otra vez. 16 puntos en cerca de diez minutos y los Magic llegaban con mucha vida al tiempo de descanso (44-38 tras una canasta final de George Hill).

Pero los Magic duraron lo que duró la inspiración de Davis y, poco a poco, canasta tras canasta, Indiana iba ampliando la diferencia gracias a la aportación de Paul George y Roy Hibbert, muy superiores a sus pares, especialmente el ex de Georgetown, que aprovechaba sus centímetros para dominar la zona a sus anchas ante la mirada de resignación de Ryan Anderson. Y la puntilla la puso Danny Granger, que, con un parcial de 7-0 de forma personal, dejaba a Indiana cerca de la victoria, con 76-55 antes del último cuarto tras un poderoso mate de Hibbert a dos manos.

Triunfo cerrado, Orlando volviendo a demostrar el mal juego de la Regular Season sin Howard, siendo incapaz de llegar a unas cifras de anotación decentes e Indiana que ya piensa en la posibilidad de volver a su Bankers Life Fieldhouse con la oportunidad de cerrar la eliminatoria ganando de nuevo en Orlando.

Por Gerard Solé.

  • Memphis Grizzlies – Los Angeles Clippers 105-98 (1-1)

Esta vez no hubo sorpresa para los Grizzlies que vencieron a los Clippers con una gran tarea colectiva. El conjunto de Memphis repartió muy bien su anotación con Rudy Gay (21 puntos), Mike Conley (19) y OJ Mayo (20) como principales argumentos. Mientras que los de rojo dependieron demasiado de lo que pudiesen producir Chris Paul (29 puntos, 6 asistencias y 5 recuperaciones) y Blake Griffin (22 puntos y 9 rebotes), quienes estuvieron muy bien aunque fuese insuficiente para quedarse con la victoria. Marc Gasol estuvo discreto pero hizo su aporte a la causa con 8 puntos, 7 rebotes y 2 tapones.

Los Clippers comenzaron mejor y, con un Paul muy efectivo en ataque, se pusieron rapidamente en ventaja por 10 a 3. Memphis buscó involucrar en la ofensiva a Zach Randolph (15 puntos y 8 rebotes) y el pívot respondió de buena manera, logrando emparejar las acciones para su equipo. El equipo de Lionel Hollins contó con los buenos ingresos de Mayo y Marreese Speights (11 puntos y 5 rebotes) que le dieron la ventaja en el tanteador. Un brillante tercer cuarto de Gay mantuvo a su equipo arriba, demostrando gran variedad de recursos en un equipo donde no existe una figura rutilante.

En el último parcial, dos triples de Mayo (los primeros de su equipo en el partido tras un inicio de 0 de 8) abrieron una brecha de 9 puntos en el tanteador para el equipo local. Griffin y Paul continuaron a lo suyo mientras apareció una tercera voz cantante en Mo Williams (11 puntos) que abrió una vertiente de esperanza en el equipo de Los Angeles. Pero los Grizzlies se mostraron muy confiados, no dispuestos a recibir otra sorpresa, y sentenciaron el partido con una buena efectividad en lanzamientos libres, en especial la de Conley, quien terminó con 11 de 12 desde esa distancia.

Muy destacable la labor en el rebote ofensivo de Memphis (16 en total) en especial Randolph (5) y Marc (3) mientras que por el lado de los Clippers hubo un alto porcentaje de cancha (56%) aunque también un elevado número de pérdidas (20).