La paciencia de Dirk Nowitzki tiene límite. Dicho límite fue sobrepasado durante el partido que disputaron Dallas Mavericks y Utah Jazz, donde el alero alemán recivió "estopa" hasta que varios empujones bajo la canasta de Dallas por un rebote colmaron el vaso de la paciencia teutona y originaran un puñetazo en la cara de Harpring, qué duda cabe, Nowitzki fue expulsado al comienzo del primer cuarto por falta intencionada descalificante, teniendo como repercusión que los Mavericks cayeran derrotados por 97-88. La estrella alemana del equipo tejano no ha querido hablar desde entonces con los periodistas.

El entrenador de los Mavericks, Rick Carlisle, hizo un flaco favor a su jugador con unas esperpénticas declaraciones intentando justificar lo injustificable, "Me parece que fue accidental. Dirk dice que su puño se cerró, por lo que fue algo involuntario de los dos", explicó, "el jugador ha reaccionado de forma instintiva a los empujones recibidos, no quería golpear a Harpring"

Según  la normativa NBA, cuando un jugador intenta golpear con la mano abierta o cerrada la cara a un rival el reglamento establece una suspensión automática, por lo que no cabe recurso alguno por parte del equipo o el jugador sancionados.

El pívot ucraniano Kyrylo Fesenko, que fue el que capturó el rebote ofensivo sobre Nowitzki, admitió que "tal vez pude empujar un poco en la espalda de Nowitzki y luego también lo pudo hacer Harpring, pero no pienso que haya sido nada brutal sino un simple lance del partido".