La NCAA es una competición particular donde las haya, especialmente en el trato con los jugadores. Hay normas estrictas sobre el dinero que llega a los jugadores (un jugador universitario no puede firmar ningún contrato publicitario, por ejemplo) y algunas relacionadas con el draft, los agentes de jugadores y la NBA. Algunas llegan a ser incluso ridículas.

Una de ellas puede afectar a OJ Mayo, la joven estrella de Southern California y uno de los prospectos más apetecibles de cara al próximo draft. Y es que Mayo aceptó un regalo de Carmelo Anthony: entradas para ver a los Denver Nuggets jugar frente a Los Angeles Lakers en el Staples Center. Si la NCAA considera a Anthony como un representante de una franquicia NBA que le ha hecho un regalo a Mayo, podría ser sancionado.

Situaciones como éstas hacen dudar sobre la idoneidad de la liga universitaria americana, tal y como todos la conocemos y sin que apenas haya sufrido modificaciones como estamento en las últimas décadas, para basar en ella todo el sistema de formación del baloncesto estadounidense. Mientras tanto, Ovinton J’Anthony Mayo esperará para conocer la decisión de la NCAA.