Miami, Boston y….Orlando. Los Magic se unen Heat y Celtics en el ramillete de candidatos en el Este para luchar por el anillo. La franquicia acaba de cerrar una doble operación con Suns y Wizards que podría devolverle a la posición dominante que tuvieron hace dos cursos, cuando se enfrentaron a los Lakers en las finales de la NBA.

Vayamos por partes. En la primera operación con los Wizards, los Magic envían al que fuera su fichaje millonario, Rashard Lewis, a Washington a cambio de la gran estrella Gilbert Arenas. Mientras que uno no ha tenido el rendimiento de acorde con su salario -tal vez en momentos puntuales durante el curso 08-09-, el otro llega a Orlando dispuesto a redimirse tras sufrir una plaga de lesiones y protagonizar el archiconocido episodio de las armas con Crittenton. Lewis llega con dos años de contrato (más de 40 millones de dólares) mientras que a Arenas todavia le quedan 3 (más de 60 millones). Arenas es quien puede beneficiarse a nivel colectivo y personal -si las lesiones le respetan- mientras que Lewis podría acelerar su cuesta abajo si no encaja en una franquicia que continúa desilusionando pese a la llegada de Wall, Hinrich y Jianlian.

En el segundo movimiento, los Magic también salen reforzados. Lo más llamativo del acuerdo con los Suns es la llegada de Turkoglu, que retorna a los Magic tras una travesía poco exitosa por Toronto y Arizona. En el verano del 2008 los Magic no quisieron asumir las pretensiones del turco y ahora le recuperan con un contrato de 3 años pero más liviano. Junto a él viajan un gran Jason Richardson -quien llegó a Phoenix en el 2008– y Earl Clark, un polivalente alero que fue elegido por los Suns en la posición 14 del draft del 2009. El primero, que acaba contrato, ha rendido a un grandísimo nivel, por lo que será de gran ayuda para los Suns mientras que Clark ha defraudado después de tener un buen tercer año en Louisville. J-Rich ya indicó a principios de temporada que estaba ante un año muy importante en su carrera y a poco que las cosas le salgan medio bien, obtendrá una buena recompensa salarial. Los Suns albergarán a un descontento Pietrus, que tuvo su tope en las finales del 2009, al rocoso Gortat, quien presumiblemente mejorará sus números, y a uno de los últimos errores de los Magic, Vince Carter.

Lo dicho al principio, la pelea por un sitio en la final se ajusta más todavía en el Este con unos Magic que completan todavía más una gran plantilla. ¿Máximos candidatos al título?