Stephen Curry: el mito del “bajito” pero Dios con el balón en las manos

No hay muchas palabras, o no las conocemos para describir el "fenómeno Curry". Parece mentira que un jugador de 1,91 metros (que por aparencia parece menos) pueda hacer y generar tanto en una pista de baloncesto. Estamos hablando de la NBA, de la mejor liga del mundo y donde los grandes nombres del planeta tienen un hueco y también en el firmamento de la historia del baloncesto. Pero cuando vemos a Stephen saboreamos un juego poco accesible para la mayoría. Mucho talento y trabajo hay atrás para hacer lo que está haciendo, unido con una gran seguridad en si mismo, que tienen los grandes jugadores de este deporte. Huele a mito. 

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Curry no puede pasar desapercibido. No podemos negarle el gran mérito que está teniendo en la mejor liga del mundo. Un jugador vistoso que a todos nos gustó en sus primeros años y que poco a poco a conseguido hacerse un hueco en esta NBA. Teniendo en cuenta los nombres que hay alrededor, como Kobe Bryant y sus últimos coletazos, el indomable Lebron James, la flamante pareja Durant-Westbrook, el tocado Derrick Rose, los incombustibles San Antonio Spurs y un largo etcétera que no termina nunca, parece mentira que haya hueco para que un Stephen Curry aparezca de repente y permita que sus Golden State Warriors obtengan 67 victorias en liga regular, además del anillo en la temporada 2014/15.  

SU ARRANQUE EN LA TEMPORADA 2015/16

El bueno de  Curry ha tenido uno de los mejores comienzos que un jugador puede desear. Los Golden State Warriors llevan un inmaculado 6-0 en la temporada y Stephen está teniendo un rendimiento estratosférico. Su peor anotación individual son los 25 puntos contra Houston Rockets y en cambio la mejor son los 53 ante los New Orleans Pelicans. En los encuentros no para de sumar, en todos ha metido un mínimo de 4 triples y ya en dos ocasiones ha llegado hasta los 8. Algo que por ejemplo, Peja Stojakovic nunca hizo en un partido de temporada regular. Todo esto le permite ser el jugador más eficiente de la liga, con un promedio de 38.7 por partido. Siete puntos por encima del rendimiento de Blake Griffin (31.2),  casi diez de Russell Westbrook (29.7). La lógica dice que sus prestaciones bajen a medida que avance la temporada, pero todos tienen el susto en el cuerpo cuando juegan contra Curry.

Los Golden State Warriors dan miedo. Ya han ganado a New Orleans en dos ocasiones de +16 y +14, a los Houston Rockets de +20, a Denver Nuggets en su partido más reciente de +15. Contra Los Angeles Clippers tuvo su partido más sufrido (+4) pero ridiculizaron a los Memphis Grizzlies de Marc Gasol por 119-69 (+50). 

ENTRE LOS MEJORES JUGADORES "BAJITOS" DE LA HISTORIA

Ha entrado en el selecto grupo de jugadores que siendo tan "bajitos" y sin un "físico privilegiado", pueden hacer tantas cosas en la pista. El último jugador que hemos tenido, con unas características "similares" es Steve Nash, que obtuvo en su etapa dorada dos MVP,s consecutivos, pero que a diferencia de Curry nunca jugó una final de la NBA y menos conseguir un anillo. Allen Iverson es otro que por sus condiciones y estatura nos recuerdan a Curry. Con sólo 1,83 es considerado uno de los mejores anotadores de la historia, cuyo promedio en toda su carrera era de 26.7 puntos. Jugó una final, pero no pudo llevarse el título ante unos innacesibles Lakers. Otros como John Stockton, estuvo cerca de "mojar" un anillo de campeón, pero por aquel entonces un tal Michael Jordan demostraba ser el mejor. Aunque el bueno de Utah Jazz ha demostrado ser uno de los jugadores más inteligentes en una pista de baloncesto. Tendríamos que ir muchos años atrás para encontrar a un jugador que siendo tan pequeño pudiera hacer tanto en una pista y ese es Bob Cousy (1,85), MVP en la temporada 1956/57 y ganador de 6 títulos de la NBA. Una cifra muy poco accesible hoy día. 

UNO DE LOS MEJORES TIRADORES EN LA HISTORIA DE LA NBA

Stephen Curry une un gran número de triples convertidos con una forma espectacular de convertirlos. En las últimas tres temporadas en la NBA es el jugador que más triples ha anotado, además de disponer de las dos mejores marcas en la historia con 286 y 272 triples. En esta temporada, en sólo 6 partidos lleva la escandalosa cifra de 36 triples, con un 51,4% de acierto. 

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El base de los Warriors ha conseguido ser uno de los mejores artistas en esta faceta, especialmente cuando tiene el balón en sus manos. Le da igual el rival y en que momento del partido se encuentre. Siempre consigue aniquilar al equipo rival a base de triples. Su excelente manejo de balón y tiempo de reacción le permite jugar contra sus defensores (a veces hasta tres a la vez) para hacer lo que quiera. Gracias a su técnica individual, le permite encontrar el hueco necesario para tirar, a pesar de su baja estatura y así levantar a los aficionados una y otra vez con sus jugadas. Simplemente espectacular.