La espera ha llegado a su fin. Arrancaron las Finales de Conferencia Este entre los Milwaukee Bucks y los Toronto Raptors, tras el legendario tiro final de Kawhi Leonard a los Philadelphia 76ers.

Los de Mike Budenholzer tuvieron casi una semana de descanso, en detrimento de su rival, que tuvo una dura y larga serie que finalizó 48 horas antes del inicio de las Finales.

Tras un comienzo dominante de Giannis Antetokounmpo, marcando los ritmos en los primeros minutos de partido, hasta que llegó la primera tormenta canadiense. Un parcial de 0-16, comandados por Pascal Siakam y Kawhi Leonard (9 puntos cada uno), bajo la batuta de Kyle Lowry, abrió la primera brecha en el marcador.

Los de Nick Nurse soportaban los intentos de remontada de los Bucks, que trataban de reaccionar y no dejar que su rival se despegue definitivamente del marcador. Y para achacar culpables que secunden a Antetokounmpo, reducimos la cifra a 2: Brook López y Malcolm Brogdon. Su impacto en el juego situó la diferencia alrededor de los 10 puntos. El pívot arrancó el cuarto anotando los 7 primeros puntos de su equipo. Mientras tanto, el impacto de Brogdon no se plasma en las estadísticas. Tras recibir 34 puntos en contra, su entrada al partido cortó la hemorragia en defensa, siendo un magnífico stopper contra un Kawhi Leonard que por momentos mostraba que iba a tener otra de sus noches. Con 11 puntos en 12 minutos, es uno de los principales activos ofensivos para acercarse en el marcador, con 2 triples de manera consecutiva que complementan los de López y Antetokounmpo.

La solidez en ambos lados de la cancha de los Raptors solventaba el ritmo que trataban de imponer los Bucks, gracias a una sobresaliente defensa coral, insignia al trabajo de Nurse, y el ataque sobrevivía gracias a la fluidez del balón, y la aportación anotadora de Leonard (15 puntos) y Siakam (11 puntos).

Las sensaciones entre ambos equipos daban pie a la inquietud. Ofensivamente, los Raptors sobrevivieron gracias al parcial endosado en el primer cuarto, pero las dudas sobre la posibilidad de soportar una nueva ofensiva de los Bucks eran cada vez mayores, y el tercer cuarto fue un fiel reflejo de ello. Se puede resumir en Kyle Lowry y Kawhi Leonard contra el mundo. De los 24 puntos que anotaron en el cuarto, 21 puntos tiene la firma de Lowry (7 puntos) y de Leonard (14 puntos). Los otros tres puntos fueron un triple que cerraba el tercer cuarto de Siakam. Si Giannis guiaba a los suyos para equilibrar fuerzas en la cancha, llegó a la fiesta el que no podía faltar: Eric Bledsoe. Con 7 puntos consecutivos, el base hacía estragos en la transición ofensiva, tratando de noquear a unos Raptors que bajaron la intensidad defensiva, lo que dejó a su rival en bandeja la oportunidad de culminar la remontada, pese a que Kawhi se empeñase en mantener las diferencias al último y definitivo cuarto (83-76).

Si la guerra al comienzo de la segunda parte por parte de los Raptors la comandaron Lowry y Leonard, éste último abandonó a su compañero en el último cuarto. La defensa propuesta por Budenholzer anuló al 2 de los Raptors, quien no anotó en el último periodo (0/3 TC, 0/1 T3, 2/2 TL). Por lo tanto, las posibilidades de los canadienses pasaron por un enchufadísimo Kyle Lowry (14 puntos en el cuarto, 5/7 TC y 3/4 T3), insuficiente ante el recital que nos tenía preparado Brook López.

Con 13 puntos en el cuarto, y 3 triples que cayeron como puñales, daba las primeras ventajas a los suyos desde que los Raptors marcaron el primer parcial al comienzo del choque. Secunddo por un Nikola Mirotic que dominó los tableros, provocó numerosas faltas interiores. Marc Gasol no supo frenarles, y culminaron la remontada de unos Milwaukee Bucks que dan el primer golpe en las Finales. Con 29 puntos, 11 rebotes y 4 tapones, es, tras Nikola Jokic en estos mismos PlayOffs, el primer center en alcanzar dichas cifras en post-temporada. Partido de récord que da aire a su equipo, es el factor X de Budenholzer.