Estamos en febrero pero en apenas unas semanas se conocerá el primer equipo que logra el ascenso a la Liga Endesa. River Andorra Morabanc tiene muchas papeletas de ser ese primer equipo pues aventaja a su principal perseguidor, el Quesos Cerrato Palencia, en dos victorias, que son tres al haberle ganado el average particular. Todo ello a falta de solo seis jornadas para el final de la fase regular.

En los últimos años, cuando se habla de ascenso siempre se añade la coletilla de “deportivo”, porque para llegar a la Liga Endesa hace falta bastante más que unos grandes resultados en la cancha. Se lo pueden preguntar a Lucentum Alicante, Ford Burgos o al propio Menorca Bàsquet, todos ellos equipos que lograron el ascenso en la cancha y que, por diferentes motivos, no pudieron hacerlo efectivo.
Si no cambian las exigencias de la ACB, River Andorra tendría que hacer frente al pago unos 3.5 millones de euros en concepto de canon de ingreso en la ACB. Además, hacer frente al desembolso de 1.8 millones de euros correspondientes al fondo regulador de ascensos y descensos. Por último, debería contar con un recinto con capacidad para 5000 espectadores. Actualmente el Poliesportiu d’Andorra cuenta con una capacidad de unos 3000 asientos, que podría ampliarse hasta los 4000 si se vuelven a habilitar las gradas de los fondos.
El precedente de Ford Burgos
La pasada temporada fue el equipo burgalés el que logró el ascenso directo pero no consiguió cumplir los requisitos para ascender a la Liga Endesa. El canon de acceso a la ACB fue el escollo insalvable.
El club estaba dispuesto a pagar el fondo regulador de ascensos-descensos e incluso había presentado un proyecto para ampliar El Plantío. Dicho proyecto ha quedado aparcado y el presidente del club burgalés apuntaba ayer mismo que el descarte del proyecto supuso "desaprovechar una oportunidad única".
El presidente del club lo dejaba claro: "nos parecía inmoral, no teníamos el dinero, ni teníamos fuerza moral para buscarlo por ningún sitio, ni para pedírselo a empresas ni a instituciones".

El caso del Lucentum era diferente. El equipo alicantino salió del concurso de acreedores, pero teniendo que abonar cerca de 500.000 euros anuales durante los próximos diez años en concepto de pagos acordados con sus acreedores. Esa situación, unida a la falta de apoyos, impidió que el club pudiera hacer frente al pago del fondo de ascenso y descensos, ya que el canon ya lo tenía depositado. Finalmente, el club alicantino acabó renunciando a la posibilidad de salir en Adecco Oro y Plata y disputa actualmente sus partidos en Primera Nacional.
¿Tercera temporada sin descensos?
En las dos últimas campañas el CB Canarias ha sido el único equipo en dar el salto a la Liga Endesa, y lo hizo en una operación a tres bandas entre la ACB, el Lucentum y propio club canario. Fue una situación atípica, marcada por el hecho de que el Lucentum estuviese en plena administración concursal y bajo supervisión judicial. Aquel Lucentum acabó 8º clasificado, pero cedió su plaza a la ACB a cambio de recibir el fondo regulador de ascensos y descensos, y luego la ACB llegó a un acuerdo con el club canario para que disputase la Liga Endesa. Ni CB Valladolid ni Estudiantes descendieron.
La pasada temporada fueron Lagun Aro GBC y La Bruixa d’Or los que se ‘salvaron’ del descenso ya que ni Burgos ni Lucentum pudieron cumplir los requisitos para ascender. La Liga Endesa quedaba virtualmente cerrada.
De repetirse la situación de las dos últimas campañas y no haber ascensos se podría dar la situación de que CB Valladolid siguiera en la Liga Endesa, a pesar de que arrastra serios problemas económicos desde hace años y que desde el propio club, tras la mala dinámica deportiva de esta campaña, se apunta a que "nadie piense en esta liga, nosotros pensamos en el proyecto".
La cuestión es si desde la ACB hay una voluntad real de que la liga siga virtualmente cerrada o si, por el contrario, se quiere adaptar las exigencias a la situación real del baloncesto actual.
Palencia, Burgos, Lugo,… ¿Quién puede ser ACB?
Aunque Andorra es favorito al ascenso directo, también habrá otra plaza que dé ese ascenso, y a ella parten como favoritos Quesos Cerrato Palencia, Breogán Lugo, Ford Burgos y UF Oviedo.
Únicamente Breogán tiene el canon en su poder y un pabellón que cumple las condiciones que exige la ACB. A priori, es el que lo tendría más 'fácil', ya que solo debería reunir el millón y medio de euros (más IVA) del fondo regulador de ascensos-descensos y podría ser equipo de Liga Endesa.

¿Qué sucederá si Palencia, Burgos y Oviedo logran el ascenso? Si Burgos lograra el ascenso ¿cómo podría afectar a su afición el tener que renunciar por segundo año consecutivo?. El club burgalés ya movió muchas fichas el pasado verano intentando apurar sus opciones de ser ACB sin tener que desembolsar el canon. Les fue imposible pero, tal vez, les ha servido para allanar el terreno de cara a una segunda intentona. Hoy mismo, la web El Contraataque, publica un artículo en esa línea.
En el caso de Palencia, ¿afrontaría la ciudad la necesaria ampliación del Marta Domínguez? ¿Se haría frente a los más de 5 millones de desembolso que supone, a día de hoy, el ascenso? El sistema actual penaliza a proyectos sólidos, que crecen de forma sostenible pero que quizás no pueden alcanzar la dimensión económica que exige la ACB.
Y la pregunta que las resume todas: ¿Qué ciudad o qué club puede asumir un ascenso a ACB en las condiciones actuales?
Relajar las exigencias
Si la ACB se mantiene inflexible en sus requisitos podríamos vivir otro año sin ascensos. Es difícil encontrar una empresa o una institución dispuesta a aportar más de 3 millones a fondo perdido a la ACB. Más aún cuando el retorno de dicha inversión es muy inferior al que había cuando se concibió este sistema de acceso a la ACB.

Desde Andorra no se quieren adelantar acontecimientos, pero las gestiones y las consultas sobre las condiciones para su posible ascenso seguro que están existiendo. La clave para que un ascenso se vaya a hacer efectivo pasarán porque se flexibilicen las exigencias de la ACB. Reducir los gastos que supone el canon e incluso permitir el acceso con un pabellón con menos de 5000 espectadores serían los pasos a dar para que Andorra pueda ascender.
De todas formas, el funcionamiento de la propia ACB requiere el acuerdo de los clubes para todas estas situaciones. Clubes que en su día abonaron el canon y que pueden considerar un 'agravio' el que los nuevos miembros no tuvieran que desembolsarlo.
A día de hoy, las miradas están en las canchas, aunque la ‘jugada’ determinante para ascender se está jugando ya en los despachos.