El Real Madrid de baloncesto enfrenta una prueba decisiva en su lucha por mantenerse en la pugna por los playoffs de la Euroliga. Tras la inesperada derrota frente al ASVEL en un duelo resuelto en el último segundo, los blancos vuelven al WiZink Center para medirse al Fenerbahçe, segundo clasificado del torneo con un sólido balance de 9-4. Chus Mateo, técnico del conjunto madridista, fue claro en sus declaraciones previas: “Somos nosotros los que tenemos que dar un paso adelante”.

LA URGENCIA DE UN REAL MADRID HERIDO EN EUROLIGA

El equipo blanco, con un balance negativo de 6-7 que le sitúa en la duodécima posición, atraviesa uno de los momentos más críticos de la temporada. A las dificultades en Euroliga se suma una reciente derrota en la Liga Endesa frente al Joventut, lo que ha encendido las alarmas en un equipo acostumbrado a estar en lo más alto. Chus Mateo reconoció la importancia del próximo enfrentamiento.

“Tenemos y necesitamos avanzar haciendo las cosas más de continuo en los momentos buenos y en los no tan buenos apretar los dientes y ser mucho más sólidos. Es algo que buscamos desde el principio y necesitamos conseguirlo ya”, explicó el técnico.
 
Chus Mateo también destacó el reto de medirse a un Fenerbahçe que, pese a su tropiezo reciente ante el Baskonia, llega con la etiqueta de favorito: “Es un equipo con gran calidad en el perímetro y un juego interior capaz de abrir el campo. Defienden bien y tienen tiradores muy peligrosos, por lo que debemos estar especialmente atentos a ellos”.

CHUS MATEO ALUDE A LA AFICIÓN DEL REAL MADRID

El WiZink Center será escenario de este crucial encuentro, y Mateo dejó claro que el apoyo de la afición será fundamental para dar la vuelta a la situación: “Necesitamos más que nunca a nuestra gente. Jugamos delante de nuestra afición y necesitamos más que nunca de ellos. Tenemos que estar juntos y sabemos que van a estar con nosotros, porque siempre lo hacen”, afirmó”, señaló.

El Real Madrid tratará de sacar provecho del factor cancha, donde ha demostrado un rendimiento más sólido que como visitante. De las siete derrotas acumuladas en Europa, seis se han producido lejos de casa, algo que busca revertir ante un rival como el Fenerbahçe, que precisamente tiene el mejor récord como visitante (5-1).