El director de ALBA Berlín, Marco Baldi, compartió su visión sobre la crisis que atraviesa el equipo alemán y su perspectiva sobre la Euroliga. En declaraciones para Bild, Baldi expresó su preocupación por la falta de una estrategia clara en la competición y despejó las dudas sobre el futuro del técnico Israel González, cuyo puesto está asegurado pese a los retos actuales.

ISRAEL GONZÁLEZ EN ALBA BERLÍN: CONFIANZA A PESAR DE TODO

El ALBA Berlín, con un balance de 3-11 en la Euroliga y 3-6 en la liga alemana, enfrenta una de sus temporadas más complicadas. Baldi admitió que la incertidumbre es grande, especialmente tras la reciente eliminación en la Copa BBL y la derrota ante el Maccabi Tel Aviv, un partido que consideró “incomprensible” debido a la falta de intensidad del equipo. Sin embargo, reiteró su compromiso con el técnico y confió en que los resultados mejoren a medida que los jugadores lesionados regresen al 100%.

Pese a los malos resultados del ALBA Berlín esta temporada, Baldi respaldó públicamente a Israel González. El equipo ha enfrentado numerosas lesiones que han dificultado la estabilidad y el rendimiento del conjunto, con ocho jugadores clave fuera de acción en algunos momentos. Aun así, el directivo enfatizó que no hay planes de relevar al entrenador. “No pensamos en cambiar al entrenador o a ningún jugador. Estamos centrados en apoyar al equipo desde fuera”, aclaró.
 
Baldi reconoció que el trabajo de González se ha visto condicionado por las circunstancias, obligándolo a improvisar en muchas ocasiones. No obstante, destacó que el técnico español encaja en el proyecto del ALBA Berlín, orientado al desarrollo de jugadores jóvenes. “Tenemos un entorno y un entrenador adecuados para mejorar a nuestros jugadores. Ese sigue siendo nuestro enfoque”, explicó.

ALBA BERLÍN Y LA GESTIÓN DE LA EUROLIGA: MODELO CUESTIONADO

Marco Baldi no ocultó su escepticismo respecto al modelo de gestión de la Euroliga. Actualmente, las decisiones clave se toman exclusivamente por los 13 equipos con licencia A, una situación que Baldi considera poco inclusiva y problemática. “El gran problema de la Euroliga es la falta de unidad entre los clubes. Sin un consenso fuerte, la gestión se hace complicada”, afirmó.

El traslado de la Final Four a Abu Dhabi ejemplifica esta falta de consulta, según el directivo alemán. “Es un procedimiento complicado que no beneficia ni a los aficionados ni al desarrollo de la liga”, aseguró. Para Baldi, este modelo pone en duda el compromiso de su equipo con la Euroliga, dado que no existe una estrategia clara para el futuro. “Amamos la Euroliga, pero no podemos comprometernos si no sabemos hacia dónde se dirige”, concluyó.