El nombre de Marvin Bootsy Thornton (1.93/36 años) ha ido unido a la elite del basket europeo durante todo lo que llevamos de siglo XXI. Un clásico moderno, el jugador norteamericano ha decidido colgar las botas tras 14 campañas en Europa. Un exterior zurdo muy polivalente, elegante como la seda, buen defensor y reboteador, dotado de una clase innata que dice adiós al basket profesional tras una última estación en el Strasbourg galo.

Thornton, nacido el 30 de julio de 1977, llegó a Europa tras dejar huella en la Universidad de St. John's, donde coincidiría con el jugador antes conocido como Ron Artest. Le fueron suficientes dos años (1998-2000)  para escribir su nombre en el libro de oro de los Red Storm gracias a los 40 puntos que le endosó al Duke de los Magette, Brand y Battier, incluyendo 7 triples, el 24 de enero de 1999. Este choque es recordado como uno de los mejores partidos disputados en el Madison Square Garden, acabando con victoria de Duke por 88-92 tras una prórroga.

Este clásico de la NCAA en su integridad

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Tras no lograr ser drafteado en la NBA, ni lograr una plaza en alguna franquicia de la liga como agente libre, Thornton aterrizó en Europa en enero de 2001 firmando por el Oregon Scientific Cantù italiano. En el conjunto transalpino crecería como jugador profesional durante dos temporadas y media, hasta dar el salto al entonces dominador del pallacanestro en las últimas dos décadas, el Montepaschi Siena. En el conjunto toscano es donde desplegó su mejor basket en tres épocas distintas (2003-2005, 2007-08 y 2011-12), sumando títulos domésticos, participaciones en la F4 de la Euroliga y distinciones individuales, como su inclusión en el segundo quinteto ideal de la Euroliga en 2008

Tributo a Thornton en Siena:

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Intercalando sus dos primeras épocas en la Mens Sana, Thornton también pasó por España, en las que fueron, con total certeza, sus dos peores temporadas en el viejo continente. Ni en Barcelona (2005-06), ni en Girona (2006-07) se pudo ver al mejor Thornton, cuyo rendimiento estuvo mediatizado esas dos temporadas por los problemas físicos. Tampoco estuvo al nivel de excelencia demostrada en Siena en sus tres temporadas en Efes Pilsen (2008-11), pero durante esos años fue un hombre clave en la franquicia cervecera de Estambul.

La temporada pasada se adaptó a la perfección al estilo alegre y dinámico del Dinamo Sassari, conjunto sardo con el que llegó a promediar unos nada despreciables 18 tantos por partido en Eurocup con nada menos 35 años. En la presente campaña, recaló con el curso comenzado en el Strasbourg galo, equipo con el que ha disputado las finales de la ProA, en las que cayeron ante el Limoges. Por desgracia, una inoportuna lesión de abductor no le permitió dar lo mejor de si en sus últimos partidos como profesional.