Que Obama es un apasionado del baloncesto es de sobras conocido. Lo que no conocíamos es que los dos grandes favoritos para ser el candidato republicano a las próximas elecciones de los Estados Unidos también amaban nuestro deporte… o quizás no tanto. La lucha de las primarias presidenciales republicanas se ha trasladado al estado de Indiana en las últimas horas y tanto Donald Trump como Ted Cruz han utilizado el baloncesto con el objetivo de arañar votos en un estado donde este deporte es una religión. 

Mientras Trump se ha dejado ver en los discursos con Bob Knight, con los riesgos que eso también supone, Cruz ha querido marcarse un triple realizando un speech en el pabellón donde se grabó la mítica película de Hoosiers. Sin embargo su lanzamiento no ha tocado aro y se le ha vuelto en su contra. El candidato nacido en Canadá y de padre cubano Ted Cruz ha sido motivo de mofa en las redes sociales al confundir el aro de baloncesto con un anillo. "Lo sorprendente es que el anillo de baloncesto en Indiana, está a la misma altura que los que se encuentran en la ciudad de Nueva York o en cualquier otro lugar de nuestro país", dijo Cruz. El hashtag #basketballring no deja de producir memes y gifs sobre su metedura de pata.

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El político republicano quiso ganarse a los votantes de Indiana al emular una de las escenas más famosas de “Hoosiers”. Un ayudante de Cruz dejó caer una cinta métrica desde la parte superior de una de las canastas para mostrar que está a a la misma altura que el resto de canastas. En la película, el entrenador Norman Dale que interpreta Gene Hackman, mide la altura del aro del pabellón antes de la final estatal para que se den cuenta que es igual que todas y así calmar a los jugadores de su modesto equipo de pueblo con el que ha clasificado para esa gran cita. 

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Indiana es el estado en el que Larry Bird se convirtió en una leyenda y las canastas son parte del paisaje tanto en los patios de las casas de las áreas de las afueras de las ciudades como en los parques de Indianapolis. De ahí que ambos candidatos se hayan volcado en el baloncesto como eje vertebrador de sus campañas. Trump utilizó para ello a un aliado amado y odiado a partes iguales como es el coach Knight. Aunque llevó a tres títulos nacionales a Indiana, sus salidas de tono habituales llegando a descalificaciones y algún abuso físico hacia sus jugadores le hacen sin duda un personaje controvertido. “Es un ganador, un gran hombre, me encanta su actitud”, dijo de él Trump, que no destaca tampoco precisamente por pasar inadvertido en sus declaraciones.

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El magnate Donald Trump aventaja ampliamente a Cruz en la carrera por las presidenciales ya que lleva logrados 987 delegados frente a los 562 de su rival pero necesita 1237 para la nominación directa y así evitar una convención disputada en julio en la que, si Trump no llega a la cifra, cualquier otro podrá hacerse con la candidatura. De ahí la importancia del estado de Indiana y de utilizar cualquier recurso, incluso el baloncesto en la búsqueda de apoyos que se traduzcan en delegados. Aunque de momento va ganando, el partido continua.