El buen ambiente reinante en la Copa del Rey española comienza a ser, tristemente, una excepción en el marco del basket europeo. Si ya habíamos hecho referencia a los incidentes acaecidos en la final de la Copa Griega, que finalmente se tuvo que celebrar a puerta cerrada, ahora tenemos que hacernos eco de lo sucedido en la final de la Copa Serbia.

Los dos clásicos del basket balcánicos con sede en Belgrado, Partizan y Estrella Roja, se enfrentaban en la final de la Copa Serbia que se celebraba en la localidad de Kragujevac. El ambiente era infernal, con las hinchadas de ambos equipos conviviendo en un ambiente crispado y donde la tensión se cortaba a cuchillo. Hasta que todo explotó cuando los seguidores del Estrella Roja trataron de quemar una bandera del equipo rival. Fue el caos. Peleas en las gradas, cargas policiales, botes de humo… todo ello obligó al trío arbitral a suspender el choque, que se reanudará mañana lunes, presumiblemente a puerta cerrada.