Quino Colom. "Los viajes que hacemos son muy largos, como ningún otro equipo"
Hacemos nuestra vida paso a paso, sin tener en cuenta que cada momento vivido es único. No somos conscientes que cada uno de estos pequeños momentos, a lo largo de la vida, se convierte en historia.
– ¿ Has terminado el desayuno?- preguntó Quino a su hermano pequeño.
– Sí- contestó Guillem.
– ¿Has cogido también la mochila del entrenamiento?
– ¿Por qué todos los hermanos mayores sois tan pesados?
– Porque somos hermanos y mayores- le respondió Quino con una sorna.
Los hermanos Colom Barrufet se disponían a comenzar un nuevo día. Desayuno, colegio, merienda y para terminar, entrenamiento en el Basquet Club Andorra. Era el año 2002 y esa iba a ser la última temporada de Quino en su amada tierra andorrana. Él jugaba primer año de cadete, mientras su hermano Guillem ya estaba en el último año de minibasket.
El Lleida se fijó en él para incorporarlo a sus categorías de formación. “Estoy convencido que tomé la decisión adecuada. Por aquel entonces, Lleida era equipo ACB, mientras que el Andorra jugaba en 1ª División”.
La temporada 2004-05, todavía en categoría junior de primer año, jugó 2 partidos en liga EBA con el Mollerusa. Todos los partidos son especiales, pero los primeros lo son más. Más cuando no fallas ni un tiro libre ni ningún tiro de campo. Así comenzó la historia de ese chico, todavía barbilampiño y algo descarado sobre la pista.
Quino Colom, todavía menor de edad, dio otro paso más al debutar en LEB Oro la temporada siguiente con el Lleida. Era el primer año después del duro descenso de la ACB, pero ese día siempre estará en su memoria. “Sólo fue 1 minuto en el que no tiré a canasta, pero la intensidad del juego y sentirte de verdad que perteneces al planeta basket, fue como protagonizar una película de hora y media”.
Viaje de ida y vuelta a Zaragoza.
El CAI Zaragoza puso sus ojos en él. La temporada 2006-07, Quino Colom compaginó partidos y entrenamientos entre el CAI de LEB Oro y su equipo asociado de liga EBA el Aranzauto Olivar. Con el CAI disputó 17 partidos. Una cantidad nada despreciable, más cuando hablamos de un recién llegado a la categoría y teniendo 18 años recién cumplidos. Promedió 3 puntos, 1 rebote y 1 asistencia en los 7:31 minutos que estaba en pista. Mientras, en EBA llegó a los más de 12 puntos, casi 2 rebotes y 3 asistencias en los 20 minutos que jugaba durante 15 partidos.
El staff técnico del CAI Zaragoza decidió cederlo a L´Hospitalet de LEB Oro para que siguiera evolucionando. Y Quino Colom hizo muy bien sus deberes. Jugó los 34 partidos de la temporada promediando 7.4 puntos, 2.6 asistencias, valorando 6.8 en los 18 minutos que jugaba. Unos números más que dignos para un chaval de 19 años que jugaba su primera temporada completa como profesional. El CAI tenía claro que no quería dejar escapar a Quino y le volvió a ceder a otro equipo de liga LEB Oro. Esta vez era a su equipo de procedencia, el Lleida. Jugó media temporada donde disputó 17 partidos y mejoró todos sus números. Promedió 10.8 puntos, 3.4 asistencias, valorando 10.8 en los 21:46 minutos que estaba en pista.
¡Ring!
– ¿Quién es?- contestó Quino medio dormido.
– Soy Alberto Angulo. ¿Podrías venir a Zaragoza? Quiero hablar contigo.
– ¡Voy ahora mismo!- contestó nervioso Quino.
Era una fría mañana de invierno y Colom hizo las maletas con urgencia para coger el autobús y llegar a Zaragoza cuanto antes. Se acercaba otro paso más hacia el sueño más profundo que jamás haya tenido el base de Andorra.
Alberto Angulo había llegado al club maño a finales de enero en sustitución de Curro Segura para intentar reconducir la marcha del equipo. Hasta ese día era coordinador técnico del club, por lo que conocía a la perfección las cualidades y situación de Quino. Además la temporada 2006-07 habían sido compañeros en el CAI.
El 8 de febrero de 2009 fue el día elegido por el destino para que Quino Colom debutara en la ACB. Fue en Zaragoza frente al Barcelona. Jugó casi 7 minutos en los que anotó 2 tiros libres, capturó 1 rebote y dio 2 asistencias.
Aquella temporada el CAI descendió a LEB Oro pero Quino Colom dio un gran paso en su carrera profesional y otro más hacia ver su sueño.
Cuatro años en Fuenlabrada.
Esa corta experiencia de tan sólo 5 partidos con el CAI le abrió las puertas de la ACB. Fuenlabrada buscaba un base, un compañero para el nuevo proyecto de Salva Maldonado que se estrenaba en el banquillo del Polideportivo Fernando Martín. “Fueron 4 años muy exitosos en Fuenlabrada. Fui allí en busca de minutos y los conseguí. Logré confianza para jugar en una liga tan complicada como la ACB. Fuenlabrada fue una etapa muy bonita para mí y exitosa para el club”.
Ese verano de 2009 fichó por el Fuenlabrada para las 3 siguientes temporadas. Un contrato largo, en un equipo asentado en la ACB y con amplias posibilidades para crecer tanto en lo personal como en lo colectivo. Y Quino Colom no desaprovechó la oportunidad. Jugó 33 partidos, en los que promedió más de 14 minutos, 4 puntos, 1 rebote y 2 asistencias. Después de un gran año donde cogió confianza y vio que podía hacerse un hueco en la competitiva liga ACB, quiso probarse a sí mismo presentándose al Draft de la NBA el día 25 de junio. No fue seleccionado y siguió con sus labores en el Fuenlabrada.

El curso 2010-11 fue un año muy importante para el Fuenlabrada. Hicieron una magnífica temporada concluyendo séptimos y clasificándose para los Play Off y ganándose el derecho a jugar en Europa la siguiente temporada. “Fue un gran año con Maldonado, Ayón, Batista, Valters y compañía. Salva nos daba mucha libertad a los bases. Gustavo Ayón continuaba muy bien el juego, me abría muchos espacios para que yo pudiera darle asistencias. Gente muy experimentada y física como Batista, lo cual era muy beneficioso para mi juego”.
El año siguiente fue histórico para Fuenlabrada. Hicieron una gran primera vuelta, lo que les llevó a participar en la Copa. También estuvieron jugando la Eurochallenge hasta los Play Off. Quizá estos dos motivos fueron los causantes de una segunda vuelta desastroso donde sólo ganaron 3 partidos y casi pierden la categoría ACB.
Ese febrero, Quino Colom ya había firmado la ampliación de su contrato por dos años más, hasta junio de 2014; aunque tan sólo cumpliría uno más. “Mi ciclo en Fuenlabrada ya se había cumplido. No hubo ningún problema con el club. Me fui de mutuo acuerdo, por lo que sólo puedo estar agradecido. Allíviví grandes momentos tanto para el equipo como para mí. Cuando nos metimos en Play Off y lo terminamos celebrando con la afición, cuando ganamos en casa al Valladolid y nos metimos en la Copa, hemos jugado en Europa y otro momento especial fue cuando ganamos al GBC en casa y nos pudimos salvar”.
En los 4 años que Quino Colom estuvo en el Fuenlabrada tan sólo se perdió 1 partido. Jugó 153 encuentros convirtiéndose en ese momento en el sexto jugador que más partidos jugó con la camiseta del equipo y promedió 6.1 puntos, 1.7 rebotes, 2.8 asistencias, con una valoración de 6.5 en los 18 minutos que estaba en pista.
Al pasar cierto tiempo, te das cuentas de las cosas que han ocurrido, y es enese momento cuando puedes evaluar todo con más ecuanimidad. El tiempo que Colom estuvo en Fuenlabrada le sirvió para crecer como persona y como jugador, como la fruta cuando está madura cae del árbol. Quino dio otros pasos más hacia su sueño, eso que tan sólo él sabía cuánto deseaba.
De Madrid al cielo, pasando por Bilbao.
El chico que nació en Andorra, que jugaba al tenis y ahora lo había cambiado por el pádel y que jugaba muy bien al baloncesto, le daba tiempo a estudiar psicología, después de dejar sus estudios en la INEF tras suspender el práctico de baloncesto.
Quino Colom en el verano de 2013 ficha por 1 año con el Estudiantes. Llega al Ramiro de Maeztu cargado de ilusión y preparado a vivir una experiencia diferente. “El Estu confió plenamente en mí. Un sitio donde estar a gusto, desarrollar mi juego y donde me dieran oportunidades. Todo eso lo encontré en el Estudiantes”.
Aquella temporada Quino Colom volvió a jugarla entera. Subió de números en cuanto a minutos, puntos, robos de balón, valoración y por supuesto en la especialidad de la casa: en asistencias.

En verano de 2014 llama a su puerta el Bilbao Basket. Una gran oportunidad de jugar en un equipo de los de arriba que además esa temporada jugaba Eurocup. “Hay un antes y un después de mi paso por Bilbao. Sito Alonso apostó por mí, me dio toda la confianza y me supo entender. Algo que antes ya había hecho Luis Guil. Con la confianza, maduré y pude entender más el juego. Le estoy muy agradecido por todo lo que hizo por mí. También me hizo crecer como jugador el poder entrenar durante un año al lado de Raül López, me enseñó mucho sobre el juego y de cómo dirigir un equipo. Han sido dos personas muy importantes para mí”.
Esa temporada de Quino en Bilbao Basket fue para enmarcar. Quedaron 4º en la ACB, jugando Play Off y la Copa. La magia visitaba el Bilbao Arena cada fin de semana que el Bilbao Basket jugaba en casa. Crecer al lado de Alex Mumbrú, Marko Todorovic, Axel Hervelle, Latavious Williams, Raül López y compañía, era relativamente fácil. Pues a pesar de todos los grandes que Quino tenía a su alrededor, fue él el MVP particular del equipo. Se convirtió en el jugador que más valoración obtuvo ese año con una media espectacular de 14.2 tantos. Le robó la titularidad a Raül López, dirigiendo con gran mano al equipo. Promedió 10 puntos, 4 rebotes y 6 asistencias en 28 minutos.
Al finalizar la temporada, Quino Colom ficha por el Unics Kazán para la temporada 2015-16. “Es cierto que si el Unics no hubiese ido a por mí, hubiera renovado por Bilbao Basket. También es cierto que tuve conversaciones con otros equipos ACB pero ninguna cuajó”.
El público se quedó con ganas de más Quino Colom, pero el destino estaba escrito y él tenía que marchar a las frías tierras de Kazán. El sueño de ese niño que comenzaba a jugar al baloncesto en Andorra se acercaba. Tan sólo le quedaba un paso.
Kazán, la ciudad tártara a orillas del río Volga
La inmensa Rusia. La lejana república de Tartaristán. El frío invierno en la ciudad de Kazán. Ese va a ser el hogar de Quino Colom en los siguientes años. Rara es la vez que logramos algo con facilidad, que doblamos la esquina y encontramos aquello que buscamos. Los sueños están hechos de un material inerte, envueltos de ilusión y para buscarlos tenemos que iniciar una aventura incierta y donde el final, aunque esté escrito, no se divise en el horizonte.
En el verano de 2015 Unics Kazán pone encima de la mesa un contrato para Quino Colom, que no puede ni debe diría yo, rechazar. “La oferta de Unics Kazán no la debía rechazar. La liga VTB está creciendo mucho, es muy competitiva. Lo más duro son los largos desplazamientos que a veces llegan a las 10 horas. El viaje más largo en la ACB, sería el más corto de la VTB”.
Quino Colom ficha por un año en el Unics Kazán y sigue con la espectacular progresión que inició en Bilbao. En Eurocup llega hasta octavos de final, es el MVP de la jornada 2 y de la 1 del Last 32. Promedió en la competición europea 11.8 puntos, 7.6 asistencias y 4 rebotes.
En la VTB también destacó durante toda la temporada. Llegaron hasta la final donde no pudieron con el Todopoderoso CSKA y cayeron por 3-1. Colom promedió en la temporada 13.1 puntos, 6.4 asistencias y 4.9 rebotes. Además fue nombrado mejor sexto jugador de la competición.
Motivos más que de sobra para que el Unics Kazán le ofreciera la continuidad con un contrato de 2 años y lo más importante, realizar su sueño.

A pesar de la distancia, el frío y vivir en tierra extraña, Quino Colom se ha adaptado muy bien a la vida en Kazán. “Es una ciudad bastante occidental. Hay buenos restaurantes y centros comerciales, buenas instalaciones y se vive muy cómodo. En ese aspecto me ha sorprendido. Sí hay tres meses que oscurece muy pronto y hace mucho frío. Ha habido días que ni se podía salir de casa con temperaturas de -17º C. A pesar de ello, me encuentro con gente que me dice que he tenido suerte porque ha sido el invierno menos frío de los últimos 100 años”.
Quino Colom no está solo. Juega rodeado de buenos jugadores, alguno de ellos ya han sido compañeros en otros equipos, por lo que todo es más fácil. “Keith Langford es el mayor talento ofensivo con el que he jugado. La presencia de Latavious Williams y Marko Banic han hecho muy fácil la adaptación en Kazan”.
Llegó el día, el 14 de octubre de 2016. Llegó el sitio, el Basket Hall de Kazan. Y llegó el minuto, el 5:40 de partido. Los sueños, sueños son; decía Calderón de la Barca. Los sueños están para cumplirlos; dice Quino Colom.
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El sueño que tenía Quino Colom desde que comenzó a dedicarse a esto del baloncesto, se hizo realidad. Quería jugar en Euroliga. El base de Andorra la Vella, debutó en la máxima competición continental con una canasta, 1 rebote y 2 asistencias en 17 minutos.
La temporada de Colom en Euroliga está siendo más que meritoria. Es el segundo jugador de su equipo que más minutos juega (27), después del inevitable Langford. El segundo que más anota (11.6), el que más asistencias reparte (5.6) y el segundo en valoración (14.7).
Quino Colom, ese niño que nació y creció en Andorra. Muy joven descubrió que podía dedicarse al maravilloso deporte del balón naranja. Desde entonces tuvo un sueño, poder jugar en el club de los selectos, con los más grandes de Europa. Después de años de esfuerzo, constancia y por qué no decirlo, de un camino lleno de sacrificio; logró su sueño y además, con creces. Siempre acompañado de esa frase: Los sueños están para cumplirlos.