Jerry West, la leyenda que inspiró el símbolo eterno de la NBA, falleció a los 86 años. El campeón de 1972 quedó inmortalizado en el logo de la liga y vivirá para siempre con el legado que dejó, no solo como jugador, sino también en el plano dirigencial. La noticia fue informada por Los Ángeles Clippers, franquicia para la que trabajó como asesor los últimos siete años.
West será la única persona en tener su nombre en el Salón de la Fama por tres roles distintos. Fue incluido como jugador en 1980, como miembro de la Selección de Estados Unidos, que en 1960 ganó la medalla olímpica de oro, y será exaltado por tercera vez este año como ejecutivo.
Jerry West estuvo en el Juego de Estrellas de la NBA en cada una de las 14 temporadas que jugó en la liga (1960-1974, siempre con Los Ángeles Lakers), y fue designado “All-NBA” en 12 ocasiones. Fue elegido MVP de las Finales de la NBA 1969, en la que los Lakers cayeron contra Boston Celtics.
¿Cuál es el legado de Jerry West?
Jerry West fue elegido en segundo lugar en el Draft de la NBA 1960 por Los Ángeles Lakers, la única franquicia en la que jugó durante su carrera. ¡Jugó 9 Finales de la NBA! Lo que lo coloca como el cuarto jugador que más veces llegó a esta instancia en la historia.
Durante los 60, West fue la gran figura comercial de la NBA, y se podría considerar como la gran estrella blanca del firmamento histórico de la liga. Fue All-NBA en diez oportunidades e integró el mejor quinteto defensivo en otras cuatro ocasiones. Además, terminó como máximo anotador en 1970 y como máximo asistidor en 1972. Un jugador sumamente completo.
Parte del legado de West es su resiliencia y su temple para superarse. Si bien perdió ocho finales, logró ganar un campeonato en la NBA, y ser el único MVP de unas finales en las que fue derrotado. Los Lakers retiraron su mítico dorsal N° 44 y finalizó su carrera con 25.192 puntos, 5.366 rebotes y 6.238 asistencias, con promedio de 27/5.8/6.7.
La importancia de Jerry West como directivo
West es una leyenda en los Lakers, no solo por ser una superestrella como jugador durante más de una década, sino también por su inteligencia como ejecutivo. Fue artífice de seis campeonatos de la franquicia como ejecutivo y fue clave, por ejemplo, para la llegada de Kobe Bryant.
Además, ganó dos anillos con Golden State Warriors en 2015 y 2017. Fue el creador de una de las dinastías más impresionantes de la historia, con Stephen Curry a la cabeza. Recibirá a mediados de este año el merecido nombramiento en el Salón de la Fama como directivo.
West fue nombrado como ejecutivo del año en dos ocasiones, 1995 y 2004. Esta segunda mención fue por su trabajo en los Memphis Grizzlies de Pau Gasol y Jason Williams, quienes llevaron por primera vez por primera vez a los Playoffs a la franquicia.