Houston Rockets concluyó la temporada con sabor agridulce tras ser eliminados en primera ronda del Playoff por Trail Blazers de los pujantets Aldridge y Lillard. El 'trinomio' Parsons-Harden-Howard más la progresión de hombres como Terrence Jones no acabó de rematar una temporada que se pronosticaba mucho mejor en sus inicios. Precisamente una de las 'patas' de los tejanos, el alero Chandler Parsons, se convertirá posiblemente en agente libre restringido después de que los Rockets no ejerciten la opción reservada para su cuarto año de contrato. Al menos, así lo ha indicado el columnista de Yahoo Sports, Adrian Wojnarowski, uno de los 'gurus' en cuanto a mercado de fichajes se refiere.

El sueldo de Parsons para el curso que viene no alcanza el millón de euros, xcorrespondiente al primer contrato de un jugador elegido en segunda ronda del draf. Todo un auténtico 'hallazgo' visto el rendimiento del jugador que ha ganado 1.800.000 dólares en tres años en los que ha promediado 14.1 puntos, 5.2 rebotes, 3.3 asistencias y un 37% en el triple (4.5 intentos por partido). Las comparaciones son odiosas en los propios Rockets:

  • Jeremy Lin ha cobrado esta temporada más de 8 millones y sus números han sido de 12 puntos y 4 asistencias, siendo relegado a al suplencia por Patrick Beverley (10p y 2.7a), que cobra menos de 800.000 dólares y que tiene 900.000 no garantizados para el próximo curso. A Lin le quedan más de 8 millones garantizados para la temporada que viene.
  • También pesan los más de 8 'kilos' del turco Omer Asik, antaño bastión defensivo y desterrado a la zona oscura en esta campaña tras la llegada de Dwight Howard. Al igual que el base de ascendencia oriental, tiene asegurados más de ocho millones para el 2014-15.
  • Los 65 millones que le quedan por cobrar en los próximos tres cursos a Dwight Howard (23 bajo la fórmula de player option para el 16-17) y otros 65 (18 no garantizados) en cuatro temporadas para James Harden. De Superman se esperaba un mayor impacto y de Harden podemos decir que justifica su contrato aunque no es el líder que vieron en él cuando salió de los Thunder.

Los Rockets quieren contratar a una gran estrella en el próximo mercado de agentes libres, siguiendo con el modelo Heat, pero a plazos. Primero fue Harden, luego Howard, y ahora se abre un amplio abanico de posibilidades. Uno de ellas es Carmelo Anthony (¿Parsons al banquillo?), se podría buscar un traspaso para conseguir a Kevin Love y mantienen el interés por lo que decidan LeBron James o Chris Bosh. Estas dos opciones están más alejadas de la realidad. Para King James se apunta casi como único escenario Cleveland, en caso de que renuncie a continuar en Miami mientras que el ala-pívot ha manifestado su deseo de continuar rebajándose el sueldo. Tanto las dos estrellas de Miami como Anthony tienen la potestad de concluir sus contratos antes de que empiece la Agencia Libre (early termination option). Pasarán a ser agentes restringidos. También comparten mismo modelo contractual Ama're Stoudemire, Dwyane Wade y Andrea Bargnani, opciones no contempladas en el plan de mercado inicial de los Rockets. En el informe de Yahoo tampoco se descarta al alemán Dirk Nowitzki, agente libre sin restricciones, aunque muy vinculado al espíritu Maverick.

Según se apunta desde USA es que Houston quiere mantener a Parsons, un jugador necesario para el equilibrio (IQ) de una plantilla dispuesta a añadir otro 'Yo' (diferente en el caso de LeBron) y que exigirá un bandwidth importante. Los 'irrisorios' 960.000 dólares contemplados para el próximo curso podrían tornarse en 12 ó 13 millones por año en caso de que se convierta en agente libre en el verano del 2015, según apreciaciones estimadas por la prensa especializada. Los Rockets estarían dispuestos a igualar cualquier oferta que posiblemente estaría ahora por debajo de los 10 millones.

Parsons es junto a Gordon Hayward, Dwyane Wade, Zach Randolph o Greg Monroe (no metemos en el mismo saco a Tim Duncan), uno de los agentes restringidos más interesantes del mercado. El haber sido elegido en segunda ronda juega en su contra por lo que se refiere a las aspiraciones de dar un estratosférico salto contractual (x10) y en favor de su actual equipo, que puede ahorrarse unos dineros y asegurarse a uno de los mejores aleros de la competición.