Mike Muscala llegó al Obradoiro en el verano de 2013 como fichaje estrella del equipo compostelano. Aunque despertaba ciertas dudas por su condición de novato recién salido de la NCAA, los que lo conocían a fondo, como nuestro especialista en la liga universitaria Gonzalo Bedía, tenían claro la calidad del cuatro/cinco norteamericano y que su estancia en la liga ACB sería corta. Si no estaba ya en la NBA era por su físico demasiado endeble para una liga tan atlética. 

Artículo de Gonzalo Bedía sobre el fichaje de Mike Muscala por Obradoiro

La idea, tanto del propio Muscala como del equipo que tenía sus derechos, Atlanta Hawks, era que su etapa en nuestra liga sirviera para completar su formación jugando a nivel profesional en la segunda mejor liga del mundo. El equipo de Georgia tenía muy en cuenta a Mike como jugador de futuro.

Y ese salto se produjo mucho antes de lo esperado: el pívot no llegó ni a completar la temporada. Después de dominar la liga ACB durante los cinco primeros meses (6º en valoración, 7º en anotación, 1º en rebotes, 8º en tapones y 2º en % de tiros de dos) los Hawks lo reclamaron (previo pago) para terminar la temporada 2013/2014 ante la plaga de lesiones que sufría su juego interior.

Los Hawks apuestan por el cinco más determinante de la Liga Endesa, por Gonzalo Bedía

Pero, como comentábamos, fue un fichaje de urgencia por los problemas físicos de los pívots de Atlanta y al bueno de Mike le tocaba trabajar para demostrar que podía tener un sitio entre las estrellas de la mejor liga del mundo. Tanto la mitad de la temporada 13/14 como sus dos primeras completas no invitaban al optimismo. Jugó una media de 10 minutos totalizando tan sólo 120 partidos en ese periodo.

En su cuarto y último año de contrato, su trabajo comenzó a producir resultados y parecía estar consiguiendo su objetivo de convertirse en un sólido jugador de rotación. Sus números de 19.05 minutos, 6.9 puntos, 3.7 rebotes y 1.4 asistencias  con grandes porcentajes de tiro confirmaban que por fin era un jugador útil para su equipo y que había dejado de simplemente calentar banquillo. Ya era de la partida en todos los duelos disputados por los Hawks.

Y llegó Ilyasova

Todo ese trabajo y esfuerzo se perdió con el Trade Deadline. Ersan Ilyasova fichaba por Atlanta confirmando el gusto de los de Georgia por los jugadores  con pasado FIBA: el propio Muscala, Delaney, el turco, Sefolosha, Schröder, Splitter, Tavares, Antic y el último en llegar, nuestro gran CalderónEl alapívot turco, jugador ya veterano en la liga y muy asentado como cuatro abierto, ha asumido todos los minutos de Muscala desde su primer partido con el que es ya su sexto equipo en la liga profesional americana, jugando una media sobre los 25 por partido.

Mike Muscala pasó de jugar 19 de media a 3 y 6 minutos en los dos primeros partidos y a no pisar el parquet en los cinco siguientes. Parece claro que la confianza de los Hawks en Mike no era excesiva y que siguen sin verlo lo suficientemente fuerte para ser un cinco ni lo suficientemente rápido para ser un cuatro en este baloncesto moderno donde prima el small ball y para el que jugadores como el turco son muchos más efectivos.

¿Y ahora que?

Muscala se encuentra en su último año de contrato a razón de 1.015.696 dólares, un salario asequible para equipos Euroliga, aunque anterior a la entrada en vigor del nuevo convenio. Este verano será agente libre sin restricciones y podrá fichar por cualquier equipo. Seguramente muchos equipos en Europa están muy atentos a la situación de un jugador que podría ser dominante en el viejo continente como ya demostró en su breve estancia en el Obradoiro y que ahora llegaría con más experiencia y mejor físico. Los problemas que puede tener la NBA para ser un jugador útil en una liga con físicos tan espectaculares no los tendría en ninguna liga europea y aquí sería un cinco muy completo y con unas condiciones físico-técnicas difíciles de ver en los interiores que juegan en Europa.

La duda es si Mike querrá seguir luchando por ganarse un puesto en la mejor liga del mundo (y también que ofertas y de que cuantía tendrá allí) o por el contrario querrá ser protagonista en la segunda mejor competición del planeta: la Euroliga.